Desde el burladero

La revuelta egipcia es algo que no puede tomarse a broma. La prensa habla estos días del efecto contagio a países como Siria, Jordania o Marruecos. Pero el nudo gordiano es Egipto, que con 80,5 millones de habitantes, se había convertido en el vigía de la zona y en el guardián de la paz gracias a un régimen moderado capaz de mantener el ‘status quo’ con Israel. No quiero pensar en las consecuencias para Occidente, si Egipto callera en mano de los radicales musulmanes. El canal de Suez es una posición estratégica para el tráfico de mercancías en el planeta. La vuelta a la normalidad de Túnez mediante un gobierno moderado, que ha erradicado los miembros del Gobierno anterior, nos hace pensar que El Cairo seguirá sus pasos. Pero..¿y si no es así? Por lo demás, es una prueba más de que tanto Estados Unidos como Europa seguían manteniendo regímenes casi coloniales, que con la crisis y la decadencia de estas potencias, buscan su manera de mejorar las condiciones de vida alejados de la influencia directa de las superpotencias. Es una aspiración legítima, que no se puede negar a ningún pueblo. El precedente tráfico está en Irán, donde una revuelta provocada por pequeños comerciantes dio el nacimiento al actual régimen de los ayatolahs. Empecemos a rezar.

La vicepresidenta Elena Salgado y el gobernador Miguel Ángel Fernández Ordóñez elevaron esta semana el listón de requirimientos para las cajas en dificultades. El resultado es que todos los grupos que están en apuros y deben ser recapitalizados pertenecen a autonomias gobernadas por el PP (Caja Madrid, Cajas España-Duero y NovaCaixaGalicia) o catalanas (CatalunyaCaixa y Unim). Me recuerda a cuando se fijó el criterio para que los ayuntamientos no se pudieran endeudar más, quedaron fuera justamente los del PP como Madrid o Valencia. ¿Es posible que Salgado y Ordóñez hayan utilizado escuadra y cartabón para determinar hasta donde podían llegar? Por cierto, las cajas con problemas son aquellas que cerraron su alianza con criterios políticos y dentro de la misma comunidad autónoma, con excepción en Caja Madrid. Como se ve, el criterio político está reñido con la racionalidad en la gestión y no ha servido más que para empeorar las cosas. En elEconomista lo advertimos. Pero..como siempre, no nos hicieron caso. Ahora, tendrán que resolver sus problemas con más dinero.

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, comienza a asomar su ideología. La Generalitat aprobó ayer una ayuda de algo más de diez millones de euros para la aerolínea Spanair, que ya lleva más de un centenar de millones en subvenciones. Es imposible reflotar una aerolínea a base de subvenciones, sólo por el prurito de que sea catalana. La también catalana Vueling ha puesto el grito en el cielo, y con razón. Vueling ha sabido hacerse un hueco en el mercado y está creciendo internacionalmente compitiendo, entre otras con Spanair, que vuela gracias al dinero de todos los catalanes. Pero atención al próximo movimiento. Ayer, el PSOE sacó adelante en el Pacto de Toledo la reforma de las pensiones, y anteayer la Ley Sinde gracias al apoyo de CiU. ¿Qué recibirá en contrapartida la formación catalana? Quizá la aprobación para emitir deuda. Habrá que ver, pero esto no nos va a salir gratis. Ya lo verán…

Si todas las novedades en materia económica que va a aportar Mariano Rajoy es reformar las pensiones que cobran los diputados, tengo que decir que me decepciona. El líder de la oposición ha perdido una magnífica ocasión de aprovechar la convención de Sevilla para presentar un programa económico completo, em lugar de esperar a ganar las elecciones por desmoronamiento del contrario. Con esa actitud, la criada le puede salir respondona. Y para muestra un botón. El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, y la vicepresidenta segunda, Elena Salgado, salieron ayer al paso con una reforma de las cajas, que sienta las bases para devolver la confianza internacional en el sector financiero español. Está bien que Arenas se queje de que la oposición no ha sido consultada, pero lo importante es que por ver primera en muchos años, el Gobierno empieza a moverse. ¡Que tome nota Rajoy!

Me decian el otro dia que no se entiende que Zapatero se niegue a hacer reformas si tanto bien puedan hacer al pais. La respuesta esta en Irlanda. Los Verdes rompieron ayer la coalicion con el aun primer ministro irlandes, Brian Cowen, dejando a este a los pies de los caballos ante la proxima cita electoral. Irlanda tuvo que asumir una fuerte subida de impuestos a cambio del dinero del fondo de restate, que origino fuertes protestas contra el Gobierno. Zapatero, con elecciones municipales y autonomicas a la vuelta de la esquina, es conscience de que esta acabado como tenga que acudir al fondo de rescate.

Ya está todo listo, lo confirmó ayer Rubalcaba, cuando usted entre en su caja a retirar o ingresar dinero, probablemente se encuentre con el dependiente de siempre -si es que no ha sido prejubilado- y le sonrían como si todo fuera igual. Pero es mentira. Su caja habitual será muy pronto un banco y la caja, muy probablemente, una fundación que recibirá un dividendo como si fuera un accionista más. Como ven, lo de que España contaba con el sistema financiero más sólido, como decía Zapatero y el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, es sólo una verdad a medias. Los grandes bancos y buena parte de los medianos sí son sólidos, el resto, sinceramente, está para la chatarra. ¿Que quién va a pagar la reparación? Pues quién va a ser, usted y yo, a través de la emisión de más deuda. El puesto de gobernador del Banco de España debería también poderse someter a sufragio público, para así echar a Ordóñez. Estamos, en definitiva, ante el resultado de la excesiva polítización de las instituciones, incluido el Banco de España.

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha pedido a La Caixa que no venda ni Repsol ni Gas Natural. La decisión ha impedido que un grupo indio entrara en la petrolera española, en contra, probablemente, de la voluntad de Luis del Rivero, presidente de Sacyr, que propiciaba la operación para tomar el control de la empresa española. Mas también quiere que en la nueva ronda de fusiones entre cajas todo quede en Catalunya, de manera que Sabadell o la propia Caixa se quede con las entidades problemáticas. Es una manera de intentar preservar el poder económico a costa de lo que sea. La cuestión es si esto es sostenible en el tiempo y, sobre todo, por La Caixa, en cuyo balance se penalizan las participaciones industriales. A este paso, no me extraja que todas las cajas acaben convirtiéndose en bancos para escapar al control político.

La inflación terminó el año pasado en el 3 por ciento, con un crecimiento de la economía cercano al cero. Los expertos se niegan a hablar de estanflación, bajo crecimiento con inflación, un mal que azotó a Japón durante la década de los noveta como consecuencia de la crisis inmobiliaria. El motivo que aducen es que la mayor parte de estas subidas de precios proviene de factores exógenos, como el alza del petróleo. Está bien, no alarmemos a nadie. Pero si los sueldos están congelados e incluso con tendencia a la baja (los de los funcionarios claramente) y sufrimos la misma inflación casi que cuando crecíamos al 3 o el 4 por ciento, es evidente que sufrimos una grave pérdida de poder adquisitivo. ¡Enhorabuena! Salgado parece que ha dado con la manera de que seamos competitivos: empobrecernos. Este es el resultado del gigantesco despilfarro público y ¡privado! de los últimos años. Ante la imposibilidad de devaluar el euro para competir, hay que rebajar nuestros sueldos y nuestro poder adquisitivo.

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, abrio este fin de semana en una entrevista en La Vanguardia la caja de los truenos. Mas anunció que las cajas catalanas tenían que abrir una segunda ronda de negociaciones entre ellas o con algún banco. La frase levantó la liebre y ayer se confirmó que Sabadell estaría dispuesto a adquirir CatalunyaCaixa a cambio de unos 2.000 millones adicionales por parte del FROB. La caja presidida por Fernando Casado había recibido ya 1.250 millones del Fondo de Rescate hace unos meses. Es decir, que no ha pasado un año, y la caja se ve obligada a abrir una segunda ronda para financiarse. El caso de CatalunyaCaixa pone de manifiesto que las denominadas fusiones frías abiertas hace unos meses por el Banco de España son una chapuza. En el sector existe el rumor de que existe otro grupo de cajas que precisará una inyección muy potente para lograr estabilizarse. ¿Estamos ante otro agujero por destapar? Ante esta perspectiva me resulta chocante que algunos crean que porque la bolsa haya subido casi el 10 por ciento en dos días, se hayan pasado nuestras penalidades. Autonomías, ayuntamientos y cajas son un caja de sorpresas, de malas sorpresas desafortunadamente, que iremos descubriendo con dolor.

Los bolsa subió ayer casi el 5,5 por ciento y repartió alegría y dinero entres los sufridos inversores del mercado español. Los motivos son dos, principalmente. Primero, el potente crecimiento confirmado por Alemania, el 3,6 por ciento, el mayor desde la reunificación hace más de 20 años. En segundo lugar, la ampliación del plan de rescate europeo, con la posibilidad de adquirir deuda de los países periféricos. Ahora bien, seamos sinceros; ¿qué ha cambiado de ayer a hoy? El rescate de Portugal sigue en marcha y se producirá después de las elecciones del 23, según anucian ya la mayoría de los bancos de inversión. Y en España no hay novedades relevantes. Zapatero está aplicado a cumplir sus reformas, que no es poco. Pero falta por destapar el agujero de las cajas de ahorros y el de las autonomías. Este último no se conocerá hasta que cambien los gobiernos regionales, tras las elecciones de mayo. Las incertidumbres siguen presentes.