Rectificar es de sabios
28 de septiembre de 2011El Gobierno ha hecho bien en parar la OPV de Loterías. A los precios tan bajos a los que iba a salir, existía el riesgo de que se convirtiera en un tema de pin pan pun en la campaña electoral. Se imaginan si una buena mañana se levanta Montoro criticando a Rubalcaba porque está derrochando el dinero del erario público. Lo lógico es que a partir de ese momento, los ciudadanos se tomaran la operación a chufla en lugar de demandar la compra de títulos. Desde elEconomista hace tiempo lo advertimos, pero Salgado hizo caso omiso, como siempre. La superministra es un pequeño gran desastre. Sólo acierta cuando rectifica. Económicamente, las cuentas no cuadraban. En el mejor de los casos, el Estado hubiera ingresado 7000 millones, que iba a destinar a reducir la deuda. Pero a cambio, se privaba de recibir una buena parte de los 3.000 millones en dividendos que aporta a las arcas públicas cada año. Privatizar Loterías carece de sentido, porque las loterías nacionales están reguladas por los Estados y existe poco margen de expansión, si no es en el mundo online, donde se puede producir una competencia desleal hacia las privadas. La decisión no sólo deja a nuestro país como un incumplidor de sus promesas de privatizaciones, que Salgado realizó ante Bruselas, si no que demuestra que la situación económica es patética, por mucho que el Ejecutivo se empeñe en negarlo. ¿Serán capaces de hacer algo bien?