Otro jornada de infarto
La bolsa perdió los 8.000 puntos el martes y bajó al menor nivel en dos años y medios. Pero por si alguien tiene dudas de que este no es el suelo, el miércoles es mejor atarse los cinturones de seguridad, porque el Tribunal Constitucional alemán se pronuncia sobre el primer rescate griego, un fallo en contra puede añadir volatilidad al mercado. ¿Por qué, si ya no se puede dar marcha atrás? Porque Merkel tiene muchos problemas para que su propia coalición respalde la ampliación del fondo de rescate europeo, que es esencial para el segundo paquete de emergencia a Grecia. La votación está prevista que se celebre el día 29, y un par de diputados del Partido Liberal, ya han manifestado que romperán la disciplina de voto y se manifestarán en contra. Este voto es también clave, porque el citado fondo debe respaldar al BCE en la compra de deuda de España e Italia. La no ampliación supondría no sólo dejar en suspenso los rescates de Grecia, Irlanda y Portugal, sino quitar el apoyo a Italia y España. En fin, que esto se puede ir la carajo, con perdón.