- 18/04/2022, 07:00
18/04/2022, 07:00
Mon, 18 Apr 2022 07:00:00 +0200
El Banco Central Europeo (BCE) arranca con lentitud el diseño del euro digital pese a tener el objetivo de ponerlo en marcha de cara a 2025. El organismo ya tiene claras las primeras características que debe cumplir esta divisa virtual para satisfacer las demandas de ciudadanos y comercios tanto físicos como online: privacidad, inmediatez y que permita un uso global. Los que serán futuros usuarios de esta moneda reclaman que el euro digital garantice preservar su privacidad, un punto que el BCE pretende cumplir, pero a medias, para no cesar en la lucha contra el blanqueo de capitales, la financiación al terrorismo u otras actividades ilícitas. Asimismo, ciudadanos y empresas piden que el euro digital permita realizar pagos al instante y sin contacto y también de manera global, es decir, que un único sistema permita pagos en cualquier comercio, entre particulares e incluso con la Administración. Fabio Panetta, miembro del Comité Ejecutivo del BCE, ya confirmó hace quince días en la Comisión ECON del Parlamento Europeo que el organismo trabaja para que la nueva divisa digital cumpla con estas tres características.