- 21/03/2023, 15:58
La noticia este domingo de que UBS compraba Credit Suisse daba paso enseguida a los detalles de la operación. Los accionistas recibirían algo más de 3.000 millones de euros frente a los apenas 8.000 millones que valía la entidad en bolsa al cierre del pasado viernes. Por contra, los tenedores de bonos de mayor riesgo de la entidad no verían ni un céntimo tras la venta. Las autoridades suizas decidían tirar por la calle de en medio para acelerar la venta. Sin embargo, este movimiento pasaba por alto el habitual orden de prelación en estos casos: primero pierden su inversión los accionistas y luego los bonistas. El lunes el foco se situaba en el agravio a estos últimos y en la particularidad de los bonos afectados.