Para haber proseguido su desaceleración y no haberse desviado en exceso de lo que esperaban los analistas, los datos de inflación de EEUU en enero conocidos este martes provocaron un importante revuelo en los mercados y punzantes reacciones entre los economistas. El IPC general se moderó de un 6,5% interanual a un 6,4% cuando se esperaba un 6,2%. Del lado de la inflación subyacente -excluyendo los más volátiles alimentos y energía-, se pasó de un 5,7% a un 5,6% cuando se estimaba un 5,5%. Dentro de ese pequeño baile de décimas se ha vuelto a generar un mundo y las voces más autorizadas del consenso económico vuelven a señalar a la Reserva Federal y a su 'problema' con el objetivo de inflación.

Redactor de economía y mercados. Doctor en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid (UCM). Un día se preguntó cómo cotizaba un bono y ya no hubo vuelta atrás.