No hay respiro para bolsas de Europa. Encadenan cuatro jornadas a la baja en mitad del miedo al virus chino. Hoy aumentan las ventas en el tramo final de este jueves tras la reunión del BCE. El Ibex 35 ha intentado marcar la diferencia y frenar la mala racha, pero finalmente cede a las caídas. Al cierre baja un 0,58% hasta los 9.518,5 puntos, tras moverse entre mínimos de 9.499 puntos y máximos de 9.604 puntos. No solo fracasa en su intento de recuperar los 9.600, sino que incluso pasa a poner en peligro los 9.500, tras perder en cuatro días un 1,78%, lo que de momento es la peor semana desde septiembre del año pasado. No obstante, se mantiene por encima de sus soportes clave, al igual que sus homólogos europeos. ACS copa la atención en el plano corporativo por sus fuertes pérdidas. Pero los inversores han tenido realmente puesta la mirada en Frankfurt, donde el Banco Central Europeo (BCE) ha anunciado el inicio de su revisión estratégica. El volumen de negocio de la bolsa española asciende 1.474 millones en la jornada de hoy.
Joan Cabrero, director de Estrategia de Ecotrader, alertaba a primera hora de la posibilidad de que las plazas de Europa pecaran de debilidad y cayeran más "en busca de primeros soportes" si Wall Street optaba "por consolidar parte de sus últimos avances".
Y eso es lo que está sucediendo: la bolsa de Nueva York registra caídas moderadas y el Eurostoxx 50, el selectivo de referencia en el Viejo Continente, retrocede hasta el entorno de su primer soporte, que se encuentran en los 3.745 puntos. Estos son los mínimos de la semana pasada y su cesión al cierre semanal (es decir, mañana) supondría una señal de "debilidad". Los descensos de las bolsas alemanas, incluida el Eurostoxx, han rozado el 1%.
No obstante, el "soporte clave" está en los 3.706 enteros. Es ahí donde realmente se pondría fin al rally que comenzó en agosto, dando paso a "una eventual corrección que podría profundizar hacia los 3.600 puntos", añade el experto.
En el caso del Ibex 35, su "base y soporte" se encuentra en los 9.468 puntos mientras su "techo y resistencia" está en los 9.700 puntos, calcula el analista técnico. Por tanto, está en tierra de nadie: este jueves se aleja de los 9.600 enteros, nivel psicológico que el principal selectivo bursátil español ya dejó atrás ayer.
Reunión del BCE
La referencia clave de hoy ha sido la reunión del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE). Se trata de la segunda del organismo presidida por la francesa Christine Lagarde.
Tal y como se esperaba, no ha habido novedades en lo que se refiere a su política monetaria. Ha mantenido los tipos de interés en el mínimo histórico del 0%, aunque la presidenta del organismo ha admitido que "preferiría unos tipos más altos". "Pero esta no es la situación que tenemos ahora", ha aclarado.
"Se esperaba ampliamente que el encuentro del BCE no contenga anuncios de calado más allá de la mención al inicio de la revisión estratégica", explicaba a primera hora Apolline Menut, economista de la gestora AXA IM. El eurobanco espera acabar esta revisión a finales de año.
Pero como sucede con los bancos centrales, sus decisiones no mueven mercado, lo hacen las palabras de sus banqueros. Lagarde ha centrado su intervención en la revisión estratégica del banco, pero ha dejado un poso amargo con su discurso alrededor de los tipos negativos. La presidenta ha dejado claro que la institución navegará durante por mucho tiempo por estos mares.
Por lo menos, Esty Dwek, jefa de Estrategia Global de Mercados de Natixis IM Solutions, pronostica que Lagarde no recortará más los tipos en 2020 "a no ser que algún acontecimiento de gran magnitud tenga lugar".
Al cumplir con el guión previsto, el euro ha cotizado toda la jornada a la baja en su cruce con el dólar. Pero continúa pegado a los 1,11 'billetes verdes'.
Asimismo, la renta fija europea se ha mantenido tranquila. El bono alemán a diez años (bund), tomado como referencia por ser el más solvente, reduce su rentabilidad al -0,31% en el mercado secundario. El italiano, que ayer se disparó al 1,40% ante la dimisión de Luigi di Maio al frente de su partido (Movimiento 5 Estrellas; M5S), se relaja hoy bajo el 1,30%. Así, la prima de riesgo transalpina baja de los 160 puntos básicos.
Al mismo tiempo, la española sigue tranquila por debajo de los 66 puntos básicos. El 'papel' nacional a diez años sitúa su interés en el 0,35%. El Tesoro Público ha captado hoy 4.973 millones de euros en una subasta de bonos y obligaciones.
ACS protagoniza las ventas
En la bolsa española, los bancos, muy expuestos a las decisiones del BCE, esperaban la comparecencia de Lagarde con marcadas alzas y, tras ella, se han desinflado e incluso girando al rojo.
Bankinter y Sabadell son los que mejor aguantan. El primero ha presentado sus cifras anuales. La entidad ha estrenado la temporada de resultados en España antes de la apertura: registró un beneficio récord en 2019, superando las previsiones de los analistas. Son los únicos bancos que se ha mantenido en positivo.
Pero más atención copa la constructora ACS, cuyas acciones han llegado a desplomarse un 7% tras conocerse el impacto negativo millonario que tendrá que su filial Cimic haya retirado el apoyo financiero a BICC. Su filial alemana Hochtief sufre en la misma medida en la bolsa de Frankfurt. Al cierre la caída es del 5,7%.
Así, la parte alta de la tabla pasa a estar ocupada por Iberdrola, Red Eléctrica que ascienden más de un 2%. Le sigue Naturgy con ascensos del 1,6%.
Coronavirus e Italia
La renta variable europea ha cotizado hoy haciendo frente a "dos focos de riesgo abiertos" de fondo, como señala el Departamento de Análisis de Renta 4 en su informe diario. Por un lado, el riesgo político en Italia, donde Di Maio ha dejado su puesto al frente del M5S, partido que forma parte de la coalición del Gobierno transalpino. Aunque hoy la renta fija del país se ha mostrado más tranquila.
Y por otro lado, pero no menos importante, los inversores siguen preocupados por el riesgo de pandemia del coronavirus en Asia. La ciudad china de Wuhan, donde comenzó el brote, ha cerrado el transporte público para evitar más contagios. Asimismo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) decide hoy si declara situación de emergencia sanitaria internacional.
Ante esta situación, las bolsas chinas han precedido a las del Viejo Continente con fuertes caídas. El parqué de Shanghai ha retrocedido un 2,75%. Ello a pesar de que Wall Street acabó ayer pegado a sus máximos históricos.
Además, la prudencia hasta ver cómo evoluciona la situación en China también tiene su impacto negativo en el petróleo, como apuntan desde Link Securities. Los precios del 'oro negro' ahondan sus caídas hasta el 3%: el barril de Brent, de referencia en Europa, baja de los 62 dólares. Algo que lógicamente afecta en bolsa a aquellas compañías expuestas al crudo: Repsol (-3,4%) e IAG (-4,2%) son de los peores valores este jueves en el Ibex 35, por detrás de ACS.