Las bolsas europeas han moderado el ímpetu con el que empezaron la semana. En este martes han cotizado con descensos que alcanzan y superan, en algunos casos, el punto porcentual. En España, ello supone que el Ibex 35 ha vuelto a ponerse por debajo de los 7.500 puntos tras caer un 1,44% y cerrar cerca de mínimos intradía. Wall Street también se suma a las ventas, aunque más contenidas (y el Nasdaq 100 incluso se resiste al rojo). Todo ello en una jornada con una agenda 'macro' escasa de referencias, en la que han destacado las nuevas previsiones económicas de la Comisión Europea.
En esta sesión el tono ha sido diferente a lo que se vivió ayer lunes en las bolsas globales, que subieron con relativa intensidad. Hay dudas en el mercado, por un lado los datos 'macro' siguen mostrando luces y sombras, y por otro están los bancos centrales inyectando grandes cantidades de liquidez de forma coordinada, empujando el precio de los activos.
Los inversores se han decantado por recoger beneficios. "En líneas generales, no saben si soplar o sorber, si dejarse arrastrar por la corriente alcista del mar de liquidez que inunda el mercado, cortesía de los bancos centrales; o si prestar atención a los crecientes números que sigue dejando el covid-19", asegura Aitor Méndez, analista de IG España.
"En líneas generales, los inversores no saben si soplar o sorber"
Al otro lado del Atlántico, Wall Street cotiza con caídas contenidas, aunque el índice tecnológico Nasdaq 100 se resiste a 'soltar' los máximos históricos que alcanzó el lunes. Mientras tanto, las principales bolsas de Europa han registrado pérdidas desde el inicio del día que han terminado superando el 1% al cierre.
Previsiones (negativas) de Bruselas
En el Viejo Continente la jornada está marcada por la actualización de las previsiones económicas de la Comisión Europea. Tal y como se esperaba, las ha revisado a la baja, es decir, ha empeorado sus pronósticos en el corto plazo como consecuencia de la crisis de la covid-19.
Bruselas augura un histórico desplome del 8,3% del producto interior bruto (PIB) de toda la Unión Europea (UE) para este año y un rebote del 5,8% para 2021. El mayor golpe económico en 2020 lo sufrirá Italia (-11,2%), seguido de España (-10,9%) y Croacia (-10,8%), según los cálculos de la Comisión.
Antes se ha conocido que la producción industrial de Alemania rebotó un 7,8% en mayo (aunque en tasa interanual la caída es del 19,3%). "El repunte estuvo por debajo de las expectativas [del mercado] y muestra que la vuelta a la normalidad no será fácil", señala Carsten Brzeski, economista jefe del servicio de análisis de ING.
Un peligroso patrón bajista
Las bolsas de Europa se mueven con este telón de fondo, y lo hacen con precaución. El EuroStoxx 50, el índice de referencia, superó el lunes con holgura la resistencia que tenía en los 3.320 puntos. Pero hoy cae de nuevo bajo ese entorno (mínimo intradía: 3.298).
Joan Cabrero, asesor de Ecotrader, cree que el selectivo muestra "un peligroso patrón en forma de isla bajista que no encaja en demasía con la fortaleza que planteó ayer la ruptura de resistencias".
El experto ya destacó a primera hora que "el cierre de los índices del Viejo Continente [ayer] fue inferior a los niveles de apertura", lo que no era una señal muy alentadora. "La presión compradora inicial no consiguió imponerse después", subrayó.
Por ello, anticipa que el ya de por sí frágil escenario alcista quedará "muy mermado" si el EuroStoxx cierra una sesión por debajo de los 3.180 enteros, sus mínimos de la semana pasada.
El Ibex 35 español fue el único selectivo europeo que en el cierre de ayer se quedó por debajo de sus resistencias, en los 7.663 puntos. Sí consiguió recuperar la cota psicológica de los 7.500, pero este martes ha vuelto a dejara atrás cerrando en los 7.447, muy cerca de mínimos intradía.
Con todo, mantiene elevado el riesgo de sufrir en el corto plazo un 'latigazo' a sus mínimos de mayo, en las 6.420 unidades (o lo que es lo mismo, unos descensos del 14% desde sus niveles actuales).
Pero si logra al final de una sesión batir los mencionados 7.663 enteros (para lo que tendría que ascender más de un 2%), abrirá la puerta a un "contexto potencialmente alcista" que supondrá alzas adicionales de hasta el 11%, ya que estará limitado a los 8.500 puntos, según Cabrero.
Pocos valores en positivo
En el plano corporativo, pocas compañías han logrado cotizar en positivo esta jornada. Tan solo Siemens Gamesa y ArcelorMittal han marcado la diferencia con alzas superiores al 1% en el primer caso y al 0,9% en el segundo.
Cellnex Telecom que ha estado en verde gran parte de la sesión ha terminado cerrando con un descenso del 0,11%. La agencia de información estadounidense Bloomberg recoge que la empresa planea hacer una ampliación de capital por 3.000 millones de euros.
Iberdrola, uno de los 'pesos pesados' del Ibex, ha registrado ganancias moderadas (0,14%). Las autoridades de Australia han aprobado hoy su oferta de compra (OPA) sobre Infigen.
En cambio, otro blue chip como Telefónica ha sido de las compañías que más han retrocedido en la sesión (más del 3%). Ayer anunció que ha entrado en el capital de la estadounidense Nozomi Networks.
No obstante, el 'farolillo rojo' de este martes es Enagás, cuyos títulos se han dejado un 3,88% en el parqué en el día que ha descontado dividendo, perjudicada también por un informe negativo de los analistas de Citi.
Ence, Colonial y Meliá también se encuentran entre los mayores descensos. Además los seis bancos cotizados en el Ibex se anotan pérdidas en la sesión. Los dos grandes, BBVA y Santander, bajan más de dos puntos porcentuales.
Al mismo tiempo, Repsol ha corregido un 1,3%. Ello a pesar de que los expertos de Credit Suisse han mantenido su recomendación de 'sobreponderar' (o 'comprar') de cara a la presentación de sus resultados semestrales. También han dejado igual el precio objetivo que le dan en 15 euros por acción, es decir, otorgándole un potencial del 90% en el corto plazo (la petrolera cotiza bajo los 8 euros).
El euro pierde los 1,13 dólares
Fuera de las bolsas, en el mercado de divisas cabe destacar que el euro se ha visto lastrado por las peores previsiones económicas anunciadas por Bruselas, por lo que vuelve a caer frente al dólar y pierde el nivel de los 1,13 'billetes verdes'.
Sin embargo, los 'malos augurios' de la Comisión Europea no han tenido impacto en el mercado de deuda soberana, que se mantiene serena un día más, a la espera de que la UE afronte el debate por el Fondo de Recuperación en los próximos días.
La prima de riesgo de España sigue bajo los 90 puntos básicos. Esta mide el diferencial de los intereses que cobran los inversores por comprar bonos nacionales frente a los que pagan por adquirir deuda alemana, considerada la más solvente de Europa.
Así, la rentabilidad del 'papel' español a diez años baja levemente en torno al 0,42%, nivel al que bajó ayer por primera vez desde principios de marzo, al tiempo que su referente germano (el bund) sitúa la suya en el -0,42%.
Hoy el Tesoro Público español ha captado 7.006 millones de euros en una subasta de letras a seis y 12 meses, con la que ha profundizado en los tipos negativos.
El oro vuelve a los 1.800 dólares
Por último, en el mercado de materias primas el oro alcanza otra vez los 1.800 dólares por onza al cierre de las bolsas europeas. El metal precioso, activo refugio por excelencia, se beneficia así de las dudas en los mercados.
Mientras tanto, los precios del petróleo se han girado ligeramente al alza. El crudo Brent europeo se mueve por encima de los 43 dólares el barril al tiempo que el West Texas de EEUU (WTI) se acerca a los 41 dólares.