Uno de los productos de ahorro favoritos de los españoles sigue perdiendo atractivo. Se trata de los depósitos -en ellos se concentra la mayor parte de su riqueza financiera-. Los dos más rentables que se pueden encontrar en el plazo de un año dentro de España han vuelto a recortar sus rentabilidades en los últimos días, hasta dejarlas ligeramente por encima del 3%. A partir de ahora el ahorrador tendrá cada vez más difícil encontrar ofertas con rendimientos superiores a esa cifra.