Redactora de Bolsa & Inversión de elEconomista
Intervención del mercado eléctrico

La guerra en Ucrania ha hecho saltar por los aires el mapa energético a nivel mundial y europeo en particular, lo que ha llevado a Bruselas a buscar acuerdos para reducir su dependencia del gas ruso y acelerar aún más la transición energética. El elevado riesgo de que Putin interrumpa el suministro al continente a medida que se aproximan los meses más fríos del año está forzando a la Comisión Europea a elaborar planes de contingencia para amortiguar el incremento de los precios de la luz.

Sector consumo

Sake Viva! es el nombre de la polémica campaña con la que la Agencia Tributaria de Japón está promoviendo el consumo de alcohol entre los jóvenes con el fin de recaudar más impuestos y ayudar a una industria que atraviesa tiempos difíciles. La pandemia y la baja tasa de natalidad conlleva menos consumidores, y esto no es un problema exclusivo del país asiático.

Las utilities europeas no están encajando bien las medidas que la Comisión Europea estudia para intervenir el mercado eléctrico con el fin de contener los precios de cara a un posible corte de suministro de gas, así como aumentar la producción de renovables o reforzar los requisitos de almacenamiento.

El tono agresivo (hawkish, en argot financiero) y contundente que empleó el viernes en Jackson Hole el presidente de la Fed, Jerome Powell, para frenar la expectativa de bajada de tipos el año que viene aún perdura en los parqués arrastrando a 32 cotizadas españolas (el 28%)a menos de un 5% de su nivel más bajo del año.

El duro mensaje que lanzó Powell en el simposio de banqueros centrales en Jackson Hole el pasado viernes no hizo sino reforzar el castigo bursátil al ciclo por la escalada de los precios y que las utilities sean de los pocos valores donde hallar refugio en este ejercicio.

Las preferidas de los analistas

En septiembre arranca una nueva temporada bursátil tras un mes en el que los inversores no han sido capaces, especialmente esta última semana, de desconectar de los nubarrones que se ciernen sobre las bolsas, como la crisis energética, la inflación o la amenaza de una recesión a nivel mundial. Con este escenario de fondo, el Ibex 35 cerrará agosto (a falta de tres sesiones) con pérdidas del 1% frente al 3% que cede el EuroStoxx 50 en el mes.

Casi doce meses después de la fallida opa de IFM sobre Naturgy y con el precio del gas instalado en niveles nunca vistos, la cotización de la compañía que preside Francisco Reynés se está viendo beneficiada en bolsa del entorno de altos precios de la energía en 2022.

La mayor brecha en el año

No está siendo un año fácil para la renta variable en general, ni para la inversión sostenible, en particular. Si bien en 2020 y 2021 la fiebre por el ESG (en base a criterios ambientales, sociales y de buen gobierno, por sus siglas en inglés) demostró ser un buen escudo frente a la pandemia, lo cierto es que, en líneas generales, las referencias sostenibles se están comportando peor que sus versiones tradicionales este año. Consulte más artículos sobre fondos responsables en elEconomista Inversión sostenible y ESG.

Con la perspectiva de que la normalización monetaria del BCE pusiera fin a una década de tipos de interés negativos, 2022 estaba llamado, esta vez sí, a ser el año de la banca en bolsa. Pero una guerra que ha trastocado el orden geopolítico mundial, disparando los precios de la energía, la amenaza de recesión en EEUU y una inflación desbocada a lo largo y ancho del planeta han disipado estas expectativas en los últimos meses. No en vano, el bancario europeo acumula un retroceso anual cercano al 12%.

Opdenergy, la primera salida a bolsa del Mercado Continuo en 2022, ha celebrado este lunes su primer mes como cotizada. La compañía de renovables acumula un retroceso del 1% desde los 4,75 euros con los que debutó en el parqué tras arrancar la semana con pérdidas del 0,8%.