La startup que salvará a los ganaderos de pagar impuestos por las flatulencias de sus vacas y ovejas
El pasado mes de octubre, Nueva Zelanda, un país de cinco millones de habitantes y 36 millones de ovejas y vacas presentó un proyecto de tasa ecológica contra las emisiones agrícolas. Se trata de un impuesto que se impondrá a partir de 2025 a los eructos y flatulencias de los bóvidos con el fin de reducir los gases de efecto invernadero que produce el metano que genera este tipo de animales. Para aquellos ganaderos que se verán afectados, llegó una startup a su socorro.