Mal comienzo de semana en la renta variable del Viejo Continente. Las ventas se han impuesto con claridad al igual que lo han hecho en los parqués asiáticos esta madrugada (Nikkei 225 japonés: -2,2%). Las pérdidas ya superaron 2% tras el toque de campana inicial y tardaron poco en ampliarse a más de tres puntos porcentuales. Aunque se demoraron después de que el ministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, rebajase la tensión entre Rusia y Estados Unidos respecto la crisis en la frontera de Ucrania, el temor a las posibles consecuencias de una política monetaria agresiva (o hawkish) en EEUU tras las últimas y persistentes declaraciones del presidente de la Fed de Saint Louis, James Bullard, ha impedido un cierre más sosegado.
El EuroStoxx 50 ha caído un 2,18% hasta los 4.064,45 puntos. Por su parte, el Ibex 35 se ha dejado un 2,55% hasta los 8.573,8 puntos. Si la semana pasada cerraba frisando los 8.800 y con un ojo puesto en los 9.100, el selectivo español paga hoy las tensiones mundiales. En lo que va de 2022 ya se deja un 1,6%, considerablemente menos, eso sí, que lo que pierde Europa (-5,4%). El EuroStoxx ha llegado a bajar hoy a los 4.000 puntos marcando mínimos anuales. De la misma forma el Ibex 35 se ha jugado las 8.500 unidades.
Las pérdidas vistas este lunes por momentos en los parqués europeos no han estado muy lejos de los registrados el pasado 24 de enero, el peor día (hasta ahora) en lo que va de 2022. Entonces el Ibex sufrió un recorte del 3,2% y el EuroStoxx, de poco más del 4%.
Joan Cabrero, analista técnico y asesor de Ecotrader, advierte de que el Ibex ha puesto a prueba la directriz alcista que viene guiando los ascensos desde los mínimos que el selectivo español marcó en diciembre.
"Del mantenimiento de esta directriz, que discurre por la zona de los 8.550 puntos, y del soporte de los 8.500 depende que no exista un deterioro en sus posibilidades alcistas de corto plazo y tengamos que hablar de debilidad", advierte el experto. Su pérdida sería algo que plantearía un contexto correctivo hasta la zona de los 8.000 puntos y en el peor de los casos los 7.700 puntos (un 10% de caída adicional).
El riesgo no es algo 'exclusivo' de la bolsa española. El EuroStoxx 50 también ha presionado su soporte en los 3.980-4.000 puntos. Si se sitúa por debajo al cierre de una jornada, el indicador continental dará paso a "un escenario más correctivo que consolidativo", avisa Cabrero apuntando a la zona de los 3.600 puntos (un 10% de caída adicional).
Dentro del selectivo español, las mayores caídas han sido para ArcelorMittal (6,33%), IAG (4,83%) y Fluidra (4,3%), mientras que tan solo ha terminado en verde un valor, Cellnex, que ha avanzado el 0,39%.
Con la mirada puesta en los bonos...
"En una sesión en la que la agenda macro se presenta vacía, los inversores en Europa seguirán pendientes de las noticias que se vayan conociendo sobre la evolución de la crisis ucraniana, mientras que vigilan de reojo el comportamiento de los rendimientos de los bonos", explicaban a primera hora los analistas de Link Securities. Y las rentabilidades en el mercado secundario han caído a plomo durante la mañana.
El interés del papel alemán a diez años (bund) ha llegado a situarse por debajo del 0,20% ante las mayores compras de deuda, si bien luego ha vuelto al 0,28%. El del bono a diez años de EEUU (T-Note), que la semana pasada escaló al 2%, se ha situado incluso al filo del 1,9%, aunque ha vuelto después al 2%.
En España, el bono a década vista renta al final del día cerca del 1,29% y la prima de riesgo, que mide el diferencial con la deuda alemana, ha superado los 100 puntos básicos por primera vez desde verano de 2020.
...y en la frontera de Ucrania
"La clara subida de la valoración de renta fija (es decir, caídas de rentabilidades) actúa como activo refugio ante el temor de un posible conflicto con Ucrania y a despecho, de momento, de las presiones inflacionistas", asegura Pedro del Pozo, director de inversiones financieras en Mutualidad de la Abogacía.
Así, tanto las pérdidas en bolsa como el repunte de los intereses en los bonos son la prueba de la preocupación por la creciente tensión en la frontera ucraniana por los rumores de una inminente invasión del país europeo por parte de Rusia, surgidos desde EEUU y rechazados por Moscú.
El presidente norteamericano, Joe Biden, y su homólogo ruso, Vladímir Putin, hablaron el sábado. "La conversación se saldó sin resultados concluyentes", apuntan desde Renta 4. Mañana Putin se citará con el canciller de Alemania, Olaf Scholz, para intentar resolver la situación por la vía diplomática. El mandatario germano ha asegurado que espera pasos claros por parte de Rusia.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, ha sugerido hoy al presidente del país, Vladímir Putin, que Moscú continúe por la vía diplomática. Una propuesta con la que Putin se ha mostrado "de acuerdo", según informa Bloomberg.
En concreto, Lavrov ha trasladado a Putin que Estados Unidos ha presentado propuestas concretas para reducir los riesgos militares en la frontera ucraniana, según Reuters.
"Suceda [la invasión rusa de Ucrania] en los próximos días o no, tendremos bolsas y demás activos de riesgo en repliegue, mientras que volatilidad, materias primas y bonos al alza", afirma el Departamento de Análisis de Renta 4.
El mercado de petróleo es el activo de riesgo que sirve de excepción ante la crisis ucraniana: esta mañana ha marcado máximos desde 2014. En concreto, el barril de Brent, referencia en Europa, ha llegado a escalar por encima de 96 dólares a primera hora. El West Texas (WTI) norteamericano ha rozado los 95 dólares el barril. Y cada vez son más los analistas que ven al oro negro por encima de los 100 dólares a corto plazo.
Sin perder de vista a la Fed
Por si todo esto fuera poco, los inversores siguen pendientes de cualquier novedad o indicio por parte de los mayores banco centrales, especialmente de la Reserva Federal de EEUU (Fed), cuyas actas se publicarán el miércoles.
Las apuestas sobre cuántas veces (y con cuánta fuerza) subirá la Fedlos tipos este año están abiertas. Esther George, presidenta de la Fed de Kansas, ha calificado de prematura un alza de tipos en 50 puntos básicos (pb) el mes que viene. Sin embargo, el presidente de la Fed de Saint Louis, James Bullard, ha vuelto a insistir hoy en su posición 'agresiva' o hawkish.
"Por tanto, la 'clave manejable' [en los mercados] sigue siendo la Fed y la 'clave inmanejable', Rusia", opinan desde Bankinter. "Continuamos atrapados en una tensa espera, esta semana mucho más tensa", concluyen estos expertos.
"La narrativa que tenemos en la mesa es la situación en Ucrania, el repunte de los contagios de covid en algunas zonas de Asia y la inflación. No obstante, lo que verdaderamente preocupa es la inflación y cómo la Reserva Federal puede generar un problema de estanflación. Todo lo demás son movimientos de corto plazo", resuelve Javier Molina, analista de eToro.