La primera sesión de 2023 se caracterizó por la compra de bonos soberanos europeos ante el cierre del mercado nipón, el londinense y Wall Street por ser festivo en sus correspondientes países. Pero a pesar del recorte de los rendimientos en la renta fija de la última sesión, bonos como el alemán siguen en máximos no vistos desde junio de 2011. La deuda alemana a diez años saltó a 2023 por encima del 2,5%, aunque al cierre de este lunes se asentara en el 2,44%.