Desde hace tiempo venimos denunciando el tosco y deliberado maquillaje existente en las cifras del paro desde la entrada en vigor de la contrarreforma laboral de Yolanda Díaz, a las que se puede aplicar con plena certidumbre aquello de “cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia”. Eso, y la diferencia existente entre el paro registrado, que es el que nos quieren vender desde el Gobierno, y el paro real que, como acaban de poner de manifiesto los responsables del Gabinete de Estudios de USO, supera en casi 1,3 millones de personas a los 2.760.408 desempleados registrados en las estadísticas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).