Redactora de mercados, con el foco puesto en las finanzas personales y en los fondos de inversión.

La inflación no ha parado de crecer en los últimos años y, aunque ese aumento de los precios se traduce en una pérdida de poder adquisitivo de no hacer nada, el 54% de los españoles que consigue ahorrar no ha invertido nunca, según el estudio sobre Hábitos de ahorro e inversión realizado por XTB. "Hay varias causas, pero la principal es un tema de cultura financiera", opina Joaquín Robles, analista del bróker, presente en España desde 2008.

Okavango Delta, el fondo que gestiona José Ramón Iturriaga para Abante, se distancia del resto de fondos activos de bolsa española. Aunque lleva semanas liderando la clasificación que agrupa a los fondos en los que al menos un 60% está descorrelacionada de su índice de referencia, esta semana toma ventaja con una rentabilidad superior al 20% desde que comenzó el año, con datos de Morningstar hasta el 14 de noviembre.

Ser conformista en el mundo de la inversión puede acabar en tragedia. También cuando el producto elegido para ahorrar es un fondo. Una de las escenas más repetidas es la del cliente que acude a su oficina bancaria en busca de información, y tras ser orientado sobre las alternativas acordes a su perfil de riesgo, puede que salga con un fondo contratado con la esperanza de que haga crecer su dinero a largo plazo. Pero ese largo plazo no debería ser sinónimo de no volver a mirar el fondo en años, algo que es bastante habitual. Aunque parezca obvio, lo idóneo es revisar periódicamente su trayectoria para poder evaluar si el producto sigue siendo el que más le conviene, o si la competencia ofrece otro mejor.

Las ofertas con motivo del Black Friday llegan también a los depósitos. EBN Banco ha anunciado un aumento de la rentabilidad de sus depósitos a 12 y 24 meses exclusivamente entre los días 16 y 27 de noviembre, ambos incluídos, y que está abierta a todos los inversores. En concreto, eleva del 3,2% al 3,35% el interés de su plazo a un año y pagará un 3,6% a 24 meses.

Los fondos españoles que invierten en bolsa global y son gestionados de forma activa llevan una rentabilidad del 6,1% este año, ligeramente inferior a la que consiguen los vehículos de este mismo tipo gestionados por las gestoras extranjeras. Pero entre ellos, hay 25 productos que son capaces de batir a la propia bolsa mundial.

Se decantan mayoritariamente por Inditex e Iberdrola; anteponen Caixabank antes que Santander y BBVA; y desechan a Telefónica y Naturgy al trastero entre los 10 valores más grandes.

La rentabilidad de las letras a 12 meses cayó en la última subasta, realizada esta semana, hasta el 3,6%, dos décimas menos respecto a la anterior. Pese a ello, este activo sigue siendo más rentable que la mayoría de depósitos del mismo plazo. Tan solo hay tres que superan esa rentabilidad del 3,6%: el de BFF, Banco BiG y Banco Finantia.

Con una rentabilidad ligeramente superior al 14%, el fondo que gestiona José Ramón Iturriaga para Abante, Okavango Delta, vuelve a ser el más rentable de bolsa española gestionado de forma activa. Un título que ya se ha colgado en otras ocasiones, gracias a su apuesta por la banca. La reconstrucción de este sector en bolsa, tras una travesía por el desierto de tipos al cero, sigue beneficiando al fondo, que mantiene algo más de un 38% de su cartera invertida en el sector financiero, según la última información disponible, a cierre de julio.

Alrededor de un tercio de los fondos activos de bolsa global no consiguen dejar atrás las pérdidas en un año de subidas generalizadas en las bolsas. Algunos de estos fondos tienen sello español. Cinco, en concreto, retroceden más de un 10% desde el inicio de curso, según datos de Morningstar.

Los planes de pensiones que las grandes empresas promueven entre sus trabajadores aún son la principal vía de ahorro colectivo a la espera de que se ultime el desarrollo del fondo público de pensiones, y se amplíe, también, la oferta de planes de pensiones de empleo simplificados (PPES). Y en los últimos meses, las rentabilidades de estos productos, que concentran 35.200 millones de euros bajo gestión y más de 2 millones de cuentas de partícipes, han seguido mejorando tras las pérdidas que sufrieron en 2022.