Las relaciones entre empresas cotizadas y sus accionistas de referencia nunca había sido una de las grandes preocupaciones de los inversores hasta que el informe de Gotham City Research sobre Grifols las puso en el foco. Los lazos entre la familia Grífols y la farmacéutica le han costado a la cotizada una crisis bursátil y de reputación de la que las organizaciones que preparan su salto al parqué han tomado nota. Así ha sido en el caso de Puig. Las patrimoniales que controlan la firma perfumera han devuelto los créditos que les había concedido antes de salir al mercado, aunque sí se mantendrán como caseros del grupo catalán.

Tras años como espectador, CriteriaCaixa toma un papel protagonista en la primera línea empresarial española. El primer holding industrial nacional ha pasado de la total calma, cuando apenas parecía un recolector de dividendos de sus participadas, a coordinar una opa en Naturgy con la emiratí Taqa y mantener conversaciones con el Gobierno para lanzarse a la compra de Talgo. Todo coincidiendo con el relevo en la cúpula el pasado enero, cuando Marcelino Armenter dejó paso a Ángel Simón como primer ejecutivo.

Antes de lanzar oficialmente la salida a bolsa, Puig se dedicó a adquirir las participaciones minoritarias de algunas filiales que todavía no controlaba y se dio el gusto de un dividendo récord de 186 millones de euros. La compañía desembolsó hasta 727 millones en efectivo solo en compras en el primer trimestre, a lo que tuvo que sumar la remuneración a los accionistas. Para financiar todas estas transacciones tuvo que pedir 680 millones de euros a sus bancos de referencia, que se los prestaron ya fuera con créditos o con líneas de revolving.

Tras publicar este jueves el folleto con el que Puig confirmaba su salida a bolsa, este viernes comenzaba el proceso de book-building. Este proceso tenía como fecha de finalización el próximo 30 de abril, pero apenas le han hecho falta unas horas a la compañía para tener la demanda suficiente con la que cubrir el total de la oferta, según confirman fuentes cercanas a la colocación.

Chery y EV Motors (Ebro) escenificaron este viernes la alianza sellada esta semana tras meses de negociación para reindustrializar la antigua fábrica de Nissan en Barcelona. Después de las dudas sobre la viabilidad del proyecto que arreciaron por la falta de capital de los promotores, ambas compañías presentaron la propuesta para volver a llenar la instalación de actividad: arrancarán con una producción de 50.000 coches, pero el objetivo de alcanzar las 150.000 unidades en 2029.

Aunque el foco de su expansión sigue en Cataluña, Caixa Enginyers -que opera en el resto de España con la marca Caja Ingenieros- crece fuera de su territorio de confort. La entidad cooperativa abrirá una nueva flagship en Madrid, frente al Retiro, que liderará y gestionará toda la operativa fuera de Cataluña. Más allá de ganar metros cuadrados, el banco busca también un buque insignia para aumentar su presencia en la capital a la par de trata de ganar visibilidad en otras ubicaciones en las que está presente, como Mallorca y Alicante.

La familia Puig afronta sus últimos días en solitario al frente de la perfumera. Y antes de oficializar la salida a bolsa, la saga catalana aprobó un dividendo récord como último pago antes de convertirse en una empresa cotizada. En una junta de accionistas celebrada el pasado 5 de abril, las diferentes ramas dieron el visto bueno a repartir 186,1 millones de euros con cargo a prima de emisión, según consta en el folleto hecho público este jueves.

Tras un 2023 teñido de rojo, Renta Corporación promete volver a ganar dinero en 2024. La inmobiliaria catalana se dejó 15,9 millones el pasado ejercicio y en esta campaña aspira a unas ganancias de 6 millones. Para lograrlo, aspira a un respiro de los tipos de interés y a la venta de tres activos, uno en Málaga y dos en Madrid, con los que ser rentable de nuevo, como ya logró en 2021 y 2022.

Arranca la salida a bolsa de Puig. La compañía acaba de publicar el folleto de la oferta con la que tiene intención de debutar en el parqué español el próximo 3 de mayo. El rango de precios de la operación pública de venta (OPV) se ha situado entre los 22 y los 24,5 euros por acción. El precio definitivo será fijado el próximo 30 de abril.

Acerinox obtiene el respaldo definitivo de los accionistas de Haynes para adquirir la firma de aleaciones estadounidense. Los propietarios de la cotizada norteamericana aprobaron este martes la entrada de la acerera española en el capital por amplia mayoría a pesar de las voces que clamaban porque la operación no obtenía el máximo rendimiento para el capital. Con el sí quiero ya en el bolsillo, la empresa que lidera Bernardo Velázquez aspira a cerrar la compra en el tercer trimestre de 2024.