Tras más de un año de encadenar operaciones corporativas, la sacudida a la cúpula de CriteriaCaixa y la revisión del plan estratégico fueron los protagonistas de las últimas semanas en el holding español. El brazo inversor de la Fundació La Caixa canceló su entrada en Celsa y Europastry tras la salida de Ángel Simón, pero este cambio en las líneas maestras del grupo no afectó a la opinión de las agencias de rating. A finales de junio, tanto Moody’s como S&P –las dos firmas que siguen al grupo- emitieron sus informes y en los dos casos mantuvieron su calificación.