La primera semana del año ha terminado con cierres alcistas en los principales índices de Wall Street pese a las dudas provocadas al inicio de la última sesión por el último dato de empleo. Gracias a esto, se mantiene la triple corona en el mercado americano.
Así, el Dow Jones ha conseguido anotarse un 0,18% hasta los 31.097,97 puntos mientras que el S&P 500 cotiza ya en los 3.824,68 enteros tras apuntarse un 0,55%. Por su parte, el Nasdaq 100 ha ganado un 1,28% y se queda en los 13.105,2 puntos. En la semana, los tres índices han rebotado un 1,61%, un 1,83% y un 1,68%, respectivamente.
Esta tendencia positiva tiene todas las papeletas para continuar en el corto plazo. "Es difícil que veamos caídas sostenibles en el mercado norteamericano", asegura Joan Cabrero, analista técnico y asesor de Ecotrader.
Este experto argumenta un día más que no habrá signos de "agotamiento comprador" mientras los índices aguanten sobre sus soportes, que se encuentran en los 12.225 puntos del Nasdaq y en los 3.630 del S&P 500 (más de un 5% abajo).
"Mientras no se pierdan esos soportes todo apunta a que aún podríamos ver alzas que lleven al Nasdaq a buscar (...) la zona de los 13.500 puntos", añade.
140.000 empleos destruidos
Los futuros de Wall Street no han cambiado su tendencia de cara a la apertura de hoy a pesar de que se ha conocido el dato oficial de empleo de diciembre en Estados Unidos. Y frente a la desaceleración en la creación de puestos de trabajo esperada, se ha producido destrucción.
En concreto, la economía norteamericana (la mayor del mundo) destruyó 140.000 empleos en el último mes de 2020, la primera caída desde que comenzó la recuperación tras el shock provocado por el coronavirus la primavera pasada. La tasa de paro, en cambio, se mantuvo en el 6,7%.
"El hecho de que la economía aún cuente con 9,8 millones de empleos menos que antes de la pandemia es espantoso", lamenta Lydia Boussour, analista de Oxford Economics.
"El empeoramiento de la situación de la situación sanitaria [por el aumento de los contagios de covid-19] y el hecho de que aún faltan meses para la inmunidad colectiva [por la vacunación] significa que el crecimiento del empleo será tibio en los próximos meses", anticipa asimismo esta experta.
Desde ING Economics consideran que la pérdida de empleos en diciembre va "aumentar la presión sobre el nuevo Gobierno para intervenir con otro paquete de apoyo fiscal significativo".
"El [mayor] gasto fiscal impulsará el crecimiento del PIB [producto interior bruto] de EEUU en 2021 y 2022", señala en este sentido David Kohl, economista jefe del banco privado Julius Baer. Y precisamente estas expectativas son las que sostienen las subidas en Wall Street, las de más estímulos a la economía con la próxima llegada de Joe Biden a la Casa Blanca.
La victoria de su partido, el demócrata, en las elecciones de esta semana en Georgia (con la que ha logrado el control del Senado) facilitará previsiblemente la implementación de su programa electoral.
¿Impeachment a Trump?
Biden no asumirá su cargo hasta dentro de doce días, aunque en este corto periodo de tiempo pueden pasar muchas cosas. Los demócratas piden la destitución inmediata del aún presidente de EEUU, Donald Trump, por haber alentado el asalto al Capitolio sin precedentes del miércoles.
Para ello, los 'azules' reclaman desde ayer la activación de la 25ª enmienda de la Constitución estadounidense y, en su defecto, plantean la posibilidad de hacer un nuevo impeachment (o juicio político) al mandatario. Esta tarde anunciarán cuáles serán sus próximos pasos.
Por su parte, Trump ha prometido una transición del poder "ordenada" el 20 de enero, aunque sigue sin reconocer de forma explícita su derrota en las elecciones presidenciales.
Su compromiso "debería suavizar la tensión en las calles, aunque se aprecia una sociedad muy fracturada", opina el Departamento de Análisis de Renta 4. Pero, por el momento, el caos político en Estados Unidos no preocupa a los inversores.