Correlación no implica causalidad. Vicente Nieves lleva buscando explicaciones a los movimientos de los mercados y de la economía desde la crisis financiera de 2007. Aún no tiene la respuesta.

El mercado inmobiliario se está tambaleando en medio mundo. Las drásticas subidas de tipos de interés, la caída de la confianza de los consumidores y la implacable erosión del poder adquisitivo, están poniendo a la vivienda al borde del precipicio en los países avanzados. El frenazo del inmobiliario parece ya casi inevitable (este martes se ha publicado que el precio de la vivienda ya cayó un 1,3% mensual en EEUU, el mayor retroceso desde 2009). Por eso, ahora cobra más relevancia analizar qué probabilidades hay de que se produzca un crash y qué profundidad podría tener la corrección de precios de la vivienda.

Desde 2020 a esta parte, muchos de los indicadores económicos que habían mostrado cierta estabilidad durante años parecen haberse vuelto locos. A veces da la sensación de que el mundo se encuentra 'patas arriba'. Buena prueba de ello es lo que está ocurriendo con los bancos centrales más importantes del mundo, como la Reserva Federal de EEUU, más conocida como Fed. Esta prestigiosa institución, que tiene la capacidad de crear dinero, está incurriendo en pérdidas, una paradoja absoluta, puesto que la Fed tiene en sus manos la mayor 'impresora de dinero' del mundo, hablando de forma coloquial. ¿Por qué está la Fed perdiendo dinero? ¿Qué consecuencias puede tener?

"Estamos en medio de una guerra en Europa, una crisis energética sin precedentes y con una inflación desbordante, y, sin embargo, todavía necesitamos mucha mano de obra para nuestras empresas". Esta es la petición de auxilio de Lars Sandahl, director general de la Confederación Industrial de Dinamarca. La solución más rápida y con más recorrido podría ser la búsqueda de trabajadores en el extranjero (personas empleadas en sus países que estén dispuestas a marcharse no por necesidad, sino por ambición), aprovechando y poniendo de relieve las ventajas del mercado laboral danés y su economía: salarios más altos y un vasto estado de bienestar.

Tras el suspense generado en China por el retraso en la publicación de varios datos clave en la economía, el fin del Congreso del Partido Comunista ha dado vía libre a la publicación de los mismos. Las filtraciones sobre el dato de PIB estos días estaban en lo correcto, la economía de China creció más de lo previsto en el tercer trimestre del año. Sin embargo, este buen dato oculta el lado más oscuro de la economía china: una recuperación incompleta que está dejando atrás a las familias y el consumo.

Economía

En el último trimestre de 2021, con la inflación mundial ya enseñando sus llamaradas, proliferaron los análisis económicos que advertían de efectos de 'segunda ronda' parecidos a los que hubo en los años 70. Una expresión que define un escenario en que la alta inflación lleva a los trabajadores a reclamar más subidas salariales para no perder poder adquisitivo. Esto, a su vez, genera mayor presiones inflacionistas, entrando en lo que se conoce como espiral salarios-precios.

Lo que en principio iba a ser una subida de 25 puntos básicos (julio) terminó siendo de 50; la de 50, en septiembre, acabó mutando en 75 (lo que parecía algo excepcional); y ahora, para acabar el año por todo lo alto, lo que parecía en septiembre una excepción amenaza con convertirse en normalidad hasta finales de 2022. El BCE podría hacer de los 75 puntos básicos el movimiento más repetido este año, con una subida de tal magnitud en octubre y diciembre, lo que llevaría a los tres tipos a superar los niveles de 2011, aquel fatídico año en el que el BCE cometió un error que se recordará durante décadas y que todavía hoy sobrevuela en los cielos de Frankfurt.

Hace pocos meses, los analistas alababan la fortaleza mostrada por el mercado inmobiliario durante la crisis del covid. Además, se insistía en que, pese a las intensas subidas de precios de la vivienda, las valoraciones estaban aún muy lejos de las alcanzadas en 2007, sobre todo teniendo en cuenta el entorno de bajos tipos de interés que hizo de la vivienda una inversión más atractiva si cabe. Pues bien, todo este argumento (que probablemente en su día era válido) se ha desmoronado en cuestión de meses. Las históricas subidas de tipos de interés, la implacable inflación y la desaceleración económica están arrastrando al sector inmobiliario. El fortín de la vivienda se está derrumbando a nivel global.

La economía española parece condenada a perder impulso a lo largo de este 2022. La desaceleración económica que se cierne sobre la Eurozona y otras regiones avanzadas terminará lastrando la actividad española. La interconexión (a través del comercio, turismo y los canales financieros) entres las grandes economías del mundo es tal que resulta muy complicado esquivar las tendencias globales. No obstante, aunque el crecimiento real del PIB sufra un parón, todo hace indicar que la tasa nominal podría presentar un avance sin parangón en más de dos décadas. Aunque esto no parezca relevante (siempre se hace referencia al crecimiento real del PIB), sí tiene importancia para algunos indicadores económicos clave.

La administración Biden ha anunciado la liberación (puesta a la venta) de 15 millones de barriles de lo que se conoce como reserva estratégica de EEUU (SPR por sus siglas en inglés), una cantidad importante de crudo que supone la parte final de la venta de 180 millones de barriles anunciada en marzo de este año, que da continuidad a la primera liberación que se oficializó a finales de 2021. EEUU junto al resto de países que confirman la Agencia Internacional de la Energía (países avanzados en su mayoría) anunciaron un plan conjunto para liberar 240 millones de barriles de crudo, en un intento para apaciguar la subida de precios del crudo. Ahora que este plan está llegando a su fin y la situación no se ha resuelto, comienzan a surgir las preguntas más peliagudas: ¿Qué pasos tomar ahora? ¿Cuánto petróleo le queda a EEUU en la reserva estratégica?

El jueves 27 de octubre tendrá lugar la penúltima reunión de política monetaria del Banco Central Europeo de este 2022. Se espera que sea una reunión con mucho contenido. Se da por hecho que se anunciará una nueva subida de tipos, aunque el tamaño de la misma aún puede 'bailar' antes de que llegue la fecha. Además, cada vez parece más probable que el BCE anuncie cambios en las TLTRO (subastas de liquidez a largo plazo) o en la remuneración de las reservas de los bancos o ambas a la vez, en un intento por drenar parte de la liquidez que se inyectó al sistema financiero durante la crisis del covid y así retirar parte de la gasolina que ha ayudado a alimentar la inflación.