Opinión
Los últimos datos publicados de inversión extranjera inciden en lo que viene siendo una tónica a lo largo de los siete años de gobierno del presidente Sánchez, ya que muestran claramente que la inversión empresarial ha disminuido desde que él llegó al Gobierno. Era de esperar que se diese tan preocupante acontecimiento, debido a que el Gobierno ha adoptado decisiones con las que ha sembrado la inseguridad jurídica, y no hay nada peor para la economía que no tener claras las reglas en las que se va a desarrollar la actividad económica, porque la incertidumbre que ello conlleva retrae las inversiones a realizar ante la duda de que vaya a cambiar la normativa en algún momento de la inversión, con el perjuicio que acarrearía para el inversor correspondiente, de manera que los empresarios se lo piensan dos veces antes de volver a invertir en España.