Redactora de Bolsa & Inversión de elEconomista

Cuando Telefónica alcanzó, a cierre de 2009, un beneficio operativo (ebitda) histórico rozando los 21.200 millones de euros, el de Iberdrola era en aquel momento cuatro veces menor (5.436 millones).

Los descensos sostenidos, pero sin tregua, que están experimentando las bolsas en los últimos meses han llevado a los principales índices a acumular pérdidas anuales del 18% a ambos lados del Atlántico. A diferencia de la caída a cuchillo que se produjo en la pandemia del Covid-19 y tras la que se produjo un rebote en forma de V, y a pesar de que el repunte de las dos últimas sesiones ha sacado a los índices de territorio bajista, en la actual crisis de inflación los inversores no encuentran aún un suelo claro que haga pensar que es el momento idóneo para regresar al mercado.

El sector bancario ha vuelto al radar de inversores y analistas tras una larga travesía por un desierto de tipos de interés ultrabajos en la última década. Los analistas miran ahora con mejores ojos al sector a como lo hacían en 2017 de acuerdo a la La Liga Ibex de elEconomista, la herramienta que clasifica a las 35 del índice por recomendación a partir de los consensos de FactSet y Bloomberg.

El S&P 500, la bolsa directora del planeta, se adentró la semana pasada en territorio bajista (como regla general, se habla de mercado bajista cuando se produce una caída continua de más del 20% desde los niveles máximos) y acumula, con datos a media sesión, un retroceso del 21% en el año. También se encuentra en esta situación el Nasdaq 100, que corrige un 28,6% pero no el Dow Jones, que pierde un 16% en el mismo periodo.

La subida fiscal que Hacienda prepara a las eléctricas con efectos desde enero de 2022 ha borrado 1.600 millones de euros del sector en bolsa en dos sesiones, a lo que se ha sumado en los últimos días el runrún de que Rusia pueda cortar el gas a España coincidiendo con la cumbre de la OTAN en Madrid la próxima semana. A la espera de que se concreten las nuevas medidas del Ejecutivo y ver si se cumplen o no las amenazas, las cotizadas del sector acumulan caídas del 5%, de media, desde el lunes.

Acciona y su filial de renovables conviven desde este lunes en el Ibex 35 apenas un año después del salto al parqué de la segunda. La firma capitaneada por Rafael Mateo ha incrementado su capitalización bursátil por encima de los 11.648 millones de euros y vale cerca de 2.000 millones más que el grupo.

Encuesta a 27 casas de análisis

La semana ha sido dura para los inversores, con las principales bolsas a ambos lados del Atlántico sufriendo descensos del 5%, de media. A los mercados les está costando digerir la posibilidad de enfrentarse a una recesión, después de que los bancos centrales hayan acelerado el ritmo de las subidas de tipos con el objetivo de meter en vereda una inflación desbocada.

El Wonder of the Seas, propiedad de Royal Caribbean y considerado el mayor crucero del mundo, dejó en su última visita a Baleares un reguero de críticas y humo tóxico que contamina "casi 10 veces más que todos los coches de Palma de Mallorca juntos", denunció la Plataforma anticruceros.

Los criterios para ingresar en el Ibex 35 no tienen en cuenta las recomendaciones que emiten los analistas sobre las cotizadas (sí la capitalización y, sobre todo, la liquidez, medida con el volumen de negociación y otros datos como la horquilla de precios), pero lo cierto es que Sacyr, que debuta junto a Acciona Energía este lunes en el selectivo, lo hará con el mejor consejo de las 35.

Entre los grandes inversores que en la junta general de Iberdrola de este viernes respaldarán, o no, la gestión de Ignacio Sánchez Galán al frente de la compañía, hay una base accionarial de más de 600.000 minoritarios de los que un alto porcentaje mantiene los títulos de la compañía en cartera entre veinte y treinta años.