Las últimas sesiones bursátiles han estado marcadas por mucho más que la temporada de resultados. La época en la que las compañías rinden cuentas ante el mercado suele suponer un mayor periodo de volatilidad, ya que las cifras de las compañías deben convencer a inversores y analistas para seguir confiando en ellas. La tormenta que sufrieron las principales referencias americanas y europeas tras los fantasmas de recesión en Estados Unidos hizo saltar todas las alarmas, aunque ahora la calma parece haber llegado de nuevo. Y en clave española, al centrarse en las ganancias estimadas para 2024, las cifras no se desvían de la senda optimista, con un 60% de firmas del Ibex 35 que ven un incremento en la previsión de beneficios para 2024 desde el 18 de julio, es decir, desde el día que arrancaba la temporada del segundo trimestre de resultados de la mano de Bankinter.