Lo que ha arrancado como el comienzo más dulce desde que hay registro en Europa puede tornarse en las próximas jornadas, y la presentación de resultados de las compañías –donde también se podrá ver algunas de las previsiones para el año en curso– es lo que determinará qué color continuará reinando. La temporada de las firmas americanas arrancó ayer de forma oficiosa con las cuentas de los grandes bancos, que no destacaron precisamente por positivas.