Celsa tiene menos de tres semanas para llegar a un acuerdo con los fondos de inversión acreedores su deuda si quiere obtener los 550 millones de euros del fondo de apoyo a la solvencia de empresas estratégicas de la Sepi. Las posiciones entre la empresa y la gran mayoría del pool no pueden estar más alejadas, pero algunas de las entidades ya comienzan a dar su brazo a torcer. Es el caso del banco HSBC, que negocia de manera individual y ha dado su visto bueno a la proposición de la compañía.