Escribiendo cosas económicas desde 2018, pero ya he pillado unas cuantas crisis. Di mis primeros pasos en Europa Press y luego en El Confidencial. Ahora sigo el rumbo del dinero y los mercados en El Economista.

A menos de un mes del 'día D' en el que el Tesoro de EEUU se quede sin fondos para pagar sus deudas y se vea obligado a declarar un 'default' técnico, los mercados están empezando a dar señales claras de preocupación. Los CDS -seguros contra impago- del gigante estadounidense ya superan a los de una larga lista de países como Grecia, Perú o Sudáfrica, lo que indica que los inversores ven un riesgo real de que Washington se vea obligado a cancelar el pago de algún bono este verano, en lo que sería la primera vez desde 1979.

La guerra de Ucrania ha encontrado un nuevo frente y no es ni Bajmut ni el petróleo ni el gas, Occidente ha puesto en marcha la 'guerra de los diamantes'. Los países del G7 están explorando en estos momentos cómo intentar cortar los ingresos que recibe el Kremlin por esta industria, que esta siendo una de las bolsas de oxígeno más inesperadas para el músculo económico de Rusia.

Disney ha sido una de las últimas compañías en presentar resultados y lo ha hecho con noticias mixtas. Por un lado la empresa ha cumplido con las estimaciones de los analistas logrando unas ganancias por acción de 93 centavos y unos ingresos superiores a los 21.810 millones. El problema ha venido desde el streaming, pues su plataforma, Disney+, ha perdido suscriptores cuando el mercado esperaba que lograse cifras en positivo en este aspecto. Concretamente, ha pasado de 161,8 millones de usuarios a 157,8 millones cuando se esperaba que superase los 163 millones.

Los últimos datos de inflación de EEUU han resucitado la esperanza de los mercados en un recorte de los tipos de la Fed para este mismo año. Tras la última reunión de la institución monetaria y las palabras de su presidente, Jerome Powell, quedó claro que esta posibilidad era realmente complicada. Sin embargo, los buenos datos han provocado un crecimiento en el optimismo de los inversores, que ya lo vuelven a ver como el escenario más probable para este mismo mes de septiembre.

La acción de Ferrari marcó en la sesión del martes un nuevo máximo histórico por encima de los 270 euros. Un hito que le permite situarse como la segunda compañía más grande de la bolsa italiana al alcanzar los 49.000 millones de euros de capitalización bursátil. Solo la utility Enel pesa más que la icónica marca deportiva al superar los 62.000 millones de euros.

Apple ha vuelto a superar las expectativas del mercado superando claramente los beneficios y los ingresos que esperaban los analistas, aupado por un gran dato de ventas del iPhone, su producto estrella. La firma ingresó 51.330 millones en ventas de este teléfono, frente a los 48.440 millones que calculaba el mercado. Esta gran cifra ayudó a batir los ingresos: 94.840 millones de dólares, frente a los 92.960 esperados. Los beneficios han sido de 24.160 millones, o 1,52 dólares por acción, batiendo claramente a los 1,43 que esperaba el consenso de mercado, según Refinitiv.

Las dudas se han adueñado por completo del mercado del petróleo. Hasta hace bien poco los analistas, tras el fuerte rebote del crudo a mediados de marzo, que subió un 20% hasta los 87 euros, hablaban abiertamente de un rally que llevaría su cotización hasta los 100 dólares. Este era el punto de vista de analistas como los de Goldman Sachs. Tras una semana de caos bancario e incertidumbre macroeconómica la situación ha dado un giro de 180 grados y ya hay analistas que hablan abiertamente de un desplome del mismo hasta los 50 dólares por barril.

El ciclo de subidas de la Reserva Federal toca a su fin. El banco central estadounidense ha anunciado un nuevo alza de los tipos de interés de 25 puntos básicos, hasta el entorno del 5%-5,25%, máximos de 2007. La clave está en que ha pasado de pronosticar "subidas constantes" a limitarse a recordar que "el Comité monitorizará de cerca la información y estudiará sus implicaciones" y que "estará preparado para ajustar su posición" si es necesario, lo que implica que la maratón de 10 subidas de tipos consecutivas ha tocado techo por el momento.

Tras un largo proceso y una muerte anunciada, las autoridades de Estados Unidos han decidido cerrar First Republic. Tras las quiebras de Silicon Valley Bank (SVB), Silvergate y Signature, las tensiones se trasladaron a su competidora, que también ha sido incapaz de contener la crisis. Las fugas de depósitos, la presión por las frenéticas caídas en bolsa y el deterioro de sus activos, han provocado que la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés) haya decidido cerrar la entidad y adjudicar sus restos a JP Morgan, como ha anunciado este lunes el organismo.

La Compañía Federal de Seguros de Depósitos, la institución de EEUU que garantiza los depósitos de los ahorradores, va a tomar el control del banco First Republic de forma inminente para comenzar su liquidación, según ha adelantado la agencia Reuters.