El coronavirus ya ha empezado a dejar víctimas entre las empresas españolas y está obligando a muchas de ellas a solicitar Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (Erte) para hacer frente a la situación. En apenas dos días, más de 200.000 trabajadores han visto cómo sus empleos quedaban suspendidos y la previsión es que la cifra siga aumentando de forma considerable según se desarrolle esta pandemia. De hecho, fuentes empresariales admite que la mayor oleada se va a producir tras conocer las ayudas concretas que ha aprobado el Consejo de Ministros, así como la forma de tramitación y el régimen de los mismos.
Por ejemplo, Burger King ha anunciado un Erte que afecta los 14.000 empleados que conforman su plantilla, tras anunciar que suspende también el reparto a domicilio.
McDonald's ha suspendido del mismo modo su actividad y ahora son las franquicias las que tiene que tramitar los expedientes de regulación de empleo, que afectarán a más de 24.000 trabajadores en total.
Estas se suman apenas un día más tarde a la decisión de Alsea (dueño de Vips, Foster's Hollywood, Starbucks, Cañas y Tapas o Domino's Pizza) que anunció un Erte el pasado domingo que afectará a un total de 22.000 trabajadores. A nivel turismo, Iberostar anunció ayer también que cerraba todos sus hoteles en el mundo por el coronavirus y que aplicará un Erte a su plantilla de 34.000 empleados. Tendam (la dueña de Cortefiel y Women'Secret, entre otras) ha anunciado un erte para toda su plantilla tras verse obligada a cerrar sus 800 tiendas en el país. Adolfo Domínguez ha activado un ERTE, por su parte, para 728 personas, el 61% de la plantilla. Entre las grandes, Inditex, que ha cesado toda su actividad en España e Italia, aún no ha movido ficha, como tampoco lo ha hecho El Corte Inglés, que ha cerrado todos sus centros, salvo alimentación.
Turismo y automoción
Iberia y Vueling ya han puesto sobre la mesa ajustes temporales de empleo para casi la totalidad de sus plantillas, con el fin de hacer frente al inminente colapso del sector. Una medida que ya han anunciado firmas como Air Europa o Norwegian, que prevé aprobar una suspensión de empleo para la mitad de sus más de 10.000 trabajadores, y que en el caso de KLM va un paso más allá, puesto que ha confirmado el despido de entre 1.500 y 2.000 trabajadores. Ryanair, con 17.000 empleados, ya habla de activar un ERTE en España o imponer vacaciones sin sueldo.
Además de restauración y turismo, otro de los sectores más castigados es el de la automoción. Ford comunicó ayer a todos los trabajadores de su planta de Almussafes (Valencia) el cese de su actividad durante una semana. En un principio, tenía planeados tres días de no-producción (de miércoles 18 a viernes 20). Sin embargo, han decidido cerrar toda la semana que viene después de que varios de sus trabajadores dieran positivo en Covid19. UGT ha ofrecido al fabricante adelantar las vacaciones de Semana Santa para evitar un expediente temporal, mientras que se aplazan las negociaciones para recortar 410 despidos previas a esta crisis.
Seat anunció ayer también a los sindicatos la presentación de un Erte para sus 14.800 trabajadores por las dificultades productivas derivadas de la crisis del coronavirus. Los trabajadores son de las plantas de Martorell y Zona Franca, el centro técnico, el centro de recambios y la fábrica de cajas de cambio de El Prat. La planta de Martorell, la principal de la marca del grupo Volkswagen, se ha parado desde ayer "hasta nuevo aviso". Nissan, por su parte, ha pospuesto la decisión de iniciar un Erte y prosigue las negociaciones con los sindicatos para ver como minimiza la parálisis productiva ocasionada por el coronavirus. Los 2.500 trabajadores de las plantas de Zona Franca y Moncada i Reixac quedan a la expectativa de una nueva reunión fijada para hoy martes. Renault también anunció ayer que suspende la actividad en sus plantas en Francia y España "hasta nueva orden, en función de la evolución de la situación sanitaria", dejando en el aire el empleo de 10.000 trabajadores en España.