Redactor de elEconomista.es. Este es un buen sitio para encontrar informaciones de bolsa y mercados financieros. También escribo en Ecotrader y podrás escucharme en el podcast Estrategia de Mercado.

Las expectativas son una herramienta clave para los bancos centrales a la hora de diseñar su política monetaria. Y desde el pasado viernes las proyecciones del mercado han dado un vuelco que apuntan más a una pausa en el camino de la Reserva Federal de Estados Unidos y del Banco Central Europeo que de una continuidad en las alzas de tipos de interés que se han visto desde junio del año pasado.

Una de las consecuencias a la caída de la rentabilidad de la deuda soberana y de un dólar debilitado es el renovado interés de los inversores por los metales preciosos que suelen ser la opción favorita del mercado en una crisis financiera.

Durante las primeras horas del lunes, el mercado de renta fija reaccionó con mucha agresividad, especialmente los vencimientos más cortos de las curvas soberanas. En los principales bonos con vencimiento a 2 años, como el alemán o el estadounidense, la jornada igualaba, en compras de deuda, los días de más tensión que se vieron en las crisis más fuertes de las últimas décadas y en fechas señaladas como 2008, 2001 o 1987.

Todas las compañías automovilísticas quieren hacerse su hueco en el mercado de vehículos eléctricos: el que está llamado a ser el futuro. En esta pugna, compañías como Rivian aspiran no solo a equipararse con Tesla, sino a rivalizar con las multinacionales que llevan décadas en el mundo de la automoción.

La máxima de los bancos centrales ha sido siempre controlar la inflación en la referencia del 2%. Un objetivo en el que se han volcado desde que comenzaron a ajustar sus políticas monetarias a base de subidas de tipos de interés y reducción de balances. Pero la realidad es que alcanzar ese 2% en el largo plazo cada vez se pone más complicado en la eurozona, donde se espera que los precios no se recorten con la velocidad que le gustaría al Banco Central Europeo.

Dos veces intervino el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos en el Senado esta semana y dos veces insistió en que seguirán utilizando su mejor herramienta para frenar la inflación: las subidas de tipos de interés. A Jerome Powell no le tembló el pulso cuando le preguntaron sus impresiones al respecto de un hipotético aumento del desempleo en EEUU como consecuencia de sus políticas.

La jornada de este martes trajo consigo el resultado de la última subasta del Tesoro Público de Letras a seis y a doce meses en la que la institución consiguió colocar 4.938,5 millones de euros -con un total de solicitudes por un importe de 8.695 millones-. Así, se fijó un interés medio que superó el 3% en ambos casos (3,11% en el caso de las Letras a seis meses y del 3,3% en el caso de las que vencen dentro de un año). Y como es habitual de las últimas subastas, supone alcanzar un coste de financiación no visto desde 2012.

Renta variable | monitor

La última compañía italiana que estuvo en la cartera de valores internacionales de Ecotrader, elMonitor, fue Enel. Pero de eso hace más de nueve meses. Ahora, es la entidad Intesa Sanpaolo la que accede en la cartera con una recomendación de compra clara por parte del mercado y con una de las mejores rentabilidades financieras (ROE) de cara a los años venideros que hace imaginar a la entidad cotizando de nuevo en los tres euros por acción.

Con la temporada de resultados terminada -a falta de que lo haga Inditex el 15 de marzo- toca hacer balance de en qué valores los analistas han reforzado la confianza sobre sus títulos y en cuáles se ha debilitado respecto a la visión que tenían antes de comunicar sus cuentas correspondientes a 2022.

En los últimos cinco años la bolsa británica se ha caracterizado por cotizar con descuento respecto a Wall Street. Y un PER (veces que el beneficio queda recogido en el precio de la acción) de alrededor de las diez veces ha llevado al índice que recoge el comportamiento de las compañías cotizadas en el Reino Unido -el Msci UK- a profundizar en este descuento.