Política monetaria
La división en el seno del Banco Central Europeo empieza a ser preocupante. Tras el sorprendente dato de inflación en agosto (el más alto desde 2011), el fuego cruzado se ha intensificado. Los 'halcones' (defienden una política monetaria más restrictivas) afilan sus garras y piden cierta normalización monetaria aprovechando que la inflación resurge y las condiciones financieras son buenas. Sin embargo, las 'palomas' (apuestan por una política monetaria más acomodaticia) creen la inflación es transitoria y los riesgos a la baja para la economía siguen siendo elevados.