economía
Los primeros indicadores de actividad comienzan a reflejar el coma inducido de la economía española para contener la propagación del coronavirus. Según PMI Compuesto de marzo, el PIB se contrajo casi un 2% al hundirse el sector servicios y en menor medida la industria. La demanda y la actividad sufren un declive sin precedentes en tres semanas. El índice comercial cayó hasta los 23 puntos desde los 52,1 de febrero, un registro mucho peor que el registrado durante la crisis financiera.