La delicada situación que atraviesan las empresas impactadas por la menor actividad durante los peores momentos del coronavirus y, en la última parte de 2021, por el alza de los precios y la energía, se refleja directamente en las renegociaciones bancarias para reestructurar la deuda y poderla asumir de manera más cómoda. El sector financiero que opera en nuestro país cerró el ejercicio pasado con un total de 31.500 millones de euros refinanciados a las compañías, lo que supone un 50% más que en el ejercicio anterior, según los datos que maneja el Banco de España.