Las secciones sindicales de CaixaBank han llevado a la junta de accionistas celebrada hoy por el banco en Valencia las protestas promovidas en los últimos meses por la situación en la que ha quedado la plantilla tras el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), en el que salieron 6.500 trabajadores, y las presiones comerciales, solicitando el abono de una paga extra a los empleados por el esfuerzo acometido en el último año.