¿Colapso en la consejería de Educación catalana?

A finales de mayo, la consejería de Educación de la Generalitat de Cataluña diseñó un método para limitar los riesgos de contagio de cara al próximo inicio del curso escolar. Se trata de la declaración responsable, un formulario que los profesores deben rellenar y cuya misión es evaluar si son profesionales de riesgo. Es decir: si son más vulnerables al virus al padecer otras enfermedades crónicas. También se debe informar si se ha pasado el virus o si se está en contacto con infectados. Además, cada docente puede cambiar sus respuestas semanalmente si su condición sanitaria varía. Cuando se anunció, la medida del departamento dirigido por Josep Bargalló fue aplaudida por la comunidad educativa. Pero meses después, las alabanzas se han tornado en fuertes críticas ante su pésimo funcionamiento. Por lo que se comenta, el colapso de la Generalitat es tal que la mayoría de los docentes aún no han recibido respuesta por parte de la Consejería de Educación al primer formulario. "A falta de dos semanas para reincorporarnos a las clases presenciales, no sabemos si somos aptos o si, por el contrario, debemos permanecer en el hogar al ser personal de riesgo", se quejan desde una asociación de profesores. A pesar de las críticas, el atasco burocrático del Govern se mantiene y se sigue sin dar respuesta a los docentes.

La decepción de Sánchez con Ángel Gabilondo

Se comenta que Ángel Gabilondo es el candidato a Defensor del Pueblo que Pedro Sánchez ofrecerá a Pablo Casado en la reunión que ambos mantendrán la próxima semana. El nombre del portavoz de los socialistas en la Asamblea de Madrid sonó para el mismo puesto al inicio de la legislatura. Ya entonces se dijo que era su destino más probable si, como finalmente ocurrió, no gobernaba la Comunidad de Madrid. Pero el hecho de que obtuviera buenos resultados, aunque finalmente acabó en la oposición debido al acuerdo entre PP, Cs y Vox, hizo que Sánchez confiara en Gabilondo para liderar la oposición a Isabel Díaz Ayuso. Pues bien, cuentan que el presidente del Gobierno está bastante decepcionado con la labor de Gabilondo en la Asamblea de Madrid. Por lo visto, le reprocha que su discurso contra Ayuso sea “muy blando” y que choca frontalmente con el propio del delegado del Gobierno en Madrid, el socialista José Manuel Franco. Por ello, muchos no ven un premio en la elección de Gabilondo para defensor del Pueblo, sino una maniobra de Sánchez para apartarlo de la Asamblea. “Se quiere endurecer la oposición a Ayuso en Madrid”, reconocen en este sentido fuentes próximas al PSOE madrileño. De hecho, ya suenan los nombres de los polémicos José Cepeda o Pilar Sánchez como candidatos a suplir a Gabilondo.  

La agenda vacía del ministro Castells

El 31 de julio el ministro de Universidades, Manuel Castells, se reunió con los sindicatos. Aquel fue su último acto oficial. Desde entonces su agenda está en blanco. No ha celebrado ningún acto más y de la hoja de ruta para retomar el curso universitario, ni rastro. De hecho, Castells no se ha pronunciado sobre el retorno a las clases académicas desde el pasado 24 junio. Ni que decir tiene que este largo periodo de descanso está siendo fuertemente comentado en la clase política. La mayoría no entiende cómo se permite a este ministro de Podemos “desaparecer” a pesar de la proximidad del inicio del nuevo curso universitario. Quizá todas esas críticas son las que han llevado al Ministerio a publicar ayer mismo en su cuenta de Twitter que Castells se reunirá con la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) a principios del mes de septiembre para abordar el inicio del próximo curso universitario. Un anuncio que, como es lógico, no ha callado las voces críticas, principalmente porque ni siquiera pone fecha a la comentada reunión. “Su publicación es un mero intento de evitar que haya más críticas a la inactividad de Castells. Es difícil esperar mucho cuando el curso empieza en octubre y no hay hoja de ruta”, aseguran desde la oposición. 

Las polémicas vacaciones del ministro de Justicia

El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, se encargó de que, en el Real Decreto de medidas para paliar la pandemia de junio, se incluyera una disposición por la que agosto se convertía en un mes hábil para la Justicia, por primera vez desde hace décadas. La decisión generó entonces importantes críticas entre los magistrados debido a las complicaciones que generó. Pues bien, todas aquellas quejas han vuelto ahora con más fuerza al comprobarse que Campo no ha predicado con el ejemplo y se ha marchado de vacaciones durante gran parte de agosto. Algunas asociaciones de magistrados, como la de Abogados del Turno de Oficio han hecho público su descontento criticando que Campo exija que se trabaje cuando “es el primero que no lo hace”. “¿La labor de ministro sí se puede parar?”, se preguntan desde este colectivo. Otros comentarios en redes sociales van en la misma línea, destacando la “incoherencia” y “nula credibilidad” que desprende un político que hace “justo lo contrario a lo que pide al resto”. A pesar de todo el descontento que se ha generado, cuentan que el ministro de Justicia no se arrepiente de sus “largas” vacaciones y considera además que solo son “cuatro o cinco” los que se están quejando.  

El turismo se despide de los viajes del Imserso

Los rebrotes han hecho que el turismo haya perdido la gran esperanza que tenía de que la temporada del verano permitiría paliar, en parte, el daño que la pandemia provocó en la de primavera. Pero los rebrotes hacen que los resultados de julio y agosto estén, con toda probabilidad, muy por debajo de los esperados al comienzo de la desescalada. Ante este panorama, y con la perspectiva de cerrar 2020 con unas pérdidas de 54 millones de viajeros y 88.000 millones, el sector aún confiaba en que los viajes del Imserso pudieran dar una alegría en un año para olvidar. Pero cuentan que esa última tabla de salvación también se está hundiendo. Es cierto que el Gobierno aún no ha comunicado qué ocurrirá con la próxima temporada de viajes del Imserso, que arranca en octubre, pero buena parte del sector la da ya por perdida. “Es el colectivo de mayor riesgo frente al Covid. Lo lógico es que se cancele”, dicen desde una cadena hotelera. Aún no se sabe cuándo Ignacio Álvarez, secretario de Estado de Derechos Sociales, comunicará la decisión del Ejecutivo. Pero fuentes cercanas al Gobierno dan casi por hecho que la campaña se retrasará a la primavera de 2021, lo que confirmará que la temporada de otoño e invierno también se pierde para el turismo español.    

¿Optará Calviño a presidir la OCDE?

Cuando a primeros de julio Nadia Calviño estaba en plena batalla por presidir el Eurogrupo, algunos ya comentaron que la vicepresidenta del Gobierno tenía otras opciones en la recámara en caso de que, como finalmente ocurrió, no alcanzara el puesto. Dicen que una de esas opciones es la OCDE, organismo que está a la búsqueda de un próximo secretario general una vez que Ángel Gurría confirmara que no se presentaría a su quinta reelección. Por ello, la carrera para liderar la OCDE está abierta y Calviño bien podría formar parte de la misma. De hecho, ya se empiezan a conocer los rivales a los que la vicepresidenta se tendría que enfrentar si optara por participar en esta nueva batalla internacional. Se trata del canadiense Bill Morneau, ministro de Finanzas de Justin Treudeau, que ya ha abandonada el Ejecutivo y ha anunciado que opta a sustituir a Gurría. Precisamente, el hecho de que la presidencia de la OCDE no sea compatible con el puesto de vicepresidenta del Gobierno, al contrario que en el caso del Eurogrupo, es lo que algunos citan como motivo para que Calviño dude en dar el paso. "Es consciente de que su marcha supondría un duro golpe para Pedro Sánchez. Más ahora en plenas negociaciones para repartir el fondo de ayuda europeo", dicen fuentes cercanas a la también ministra de Economía.

¿Hubo realmente acoso a Iglesias en Lena?

Varios miembros de Ejecutivo, incluido Pedro Sánchez, se han solidarizado con el vicepresidente Pablo Iglesias y con la ministra de Igualdad, Irene Montero, por el presunto acoso del que han sido objeto por parte de simpatizantes de extrema derecha y que les ha llevado a suspender sus vacaciones en el concejo asturiano de Lena. Pues bien, en círculos periodísticos se comenta que la familia Iglesias no acortó sus vacaciones, sino que tenía previsto pasar en el lugar solo el fin de semana, mucho antes de que se tuviera noticia de esos acosos. Así lo indican al menos algunos periodistas de la zona que sabían que el vicepresidente y su familia se irían de Lena el pasado domingo. “La historia no es como nos la cuentan”, dicen desde la oposición, que acusa a Podemos de ocultar cuáles eran los verdaderos planes de la familia Iglesias. Sea como sea, las dudas no se quedan solo en la duración de las vacaciones, ya que algunas fuentes afirman que el supuesto acoso realmente no se produjo. “No hubo concentraciones ni nada parecido”, dicen en la localidad de Lena.    

La 'desaparición' de Montero y Garzón

El pasado 22 de julio, la ministra de Igualdad Irene Montero tuvo una reunión telemática con la comisaria de Igualdad de la UE, Helena Dalli. Desde entonces su agenda está vacía. Algo similar le ocurre a Alberto Garzón, cuya última aparición pública fue en una entrevista radiofónica el pasado 24 de julio. Por lo que se comenta la “desaparición” de ambos ministros podemitas está siendo objeto de críticas y comentarios por parte del PSOE, donde no entienden cómo dos miembros del Ejecutivo pueden “volatilizarse durante un mes con la que está cayendo con los rebrotes”. Máxime cuando Moncloa ya había trasladado a los componentes del Gobierno que el coronavirus obligaba a estar “al pie del cañón” aunque se estuviera de vacaciones. Por dicho motivo, la mayoría de los ministros ha mantenido actos de perfil bajo para cumplir el expediente. Por contra Montero y Garzón ni siquiera se han molestado en disimular que estaban de vacaciones. Se rumorea también que el presidente Pedro Sánchez está descontento con la inactividad de ambos. “Ya se lo ha comunicado a los dos. Pero será en el Consejo de Ministros del día 25 cuando el presidente aprovechará el momento para afear la desaparición de Montero y Garzón”, dicen desde Moncloa. 

La difícil ‘vuelta al cole’ que Educación teme

A falta de tres semanas para que comience el nuevo curso escolar, las dudas anegan a los profesionales de la formación hasta el punto de que algunos de ellos ya avisan de que “en octubre los niños estarán en sus casas”. Los profesores se quejan de que la improvisación ha sido el eje de la política del Ministerio de Educación y de las comunidades autónomas desde que la pandemia obligara a cerrar las aulas en marzo. “Se quiere garantizar las clases presenciales. Pero falta un protocolo claro y las pocas directrices que hay son insuficientes para evitar que haya contagios”, dicen desde una asociación de profesores. “Además se nos está presionando como si fuéramos médicos para que controlemos la situación en los centros”, añaden. Ante este panorama, los profesores ya han pedido a la ministra Isabel Celáa más recursos y una hoja de ruta clara. A pesar de ello, muchos no confían en que las soluciones lleguen a tiempo, por lo que amenazan directamente con “movilizaciones y paros” en aquellos territorios donde no pueda garantizarse “un mínimo de seguridad para los niños y los profesores”.

Vox lanzará su sindicato en tan sólo tres semanas

Se comenta que Vox ultima el lanzamiento de su propia organización sindical con la que pretende hacer competencia a UGT y CCOO. En concreto, dicen que la presentación en sociedad será dentro de tres semanas, coincidiendo con el inicio del nuevo curso político. Estas informaciones evidencian que los de Santiago Abascal iban en serio cuando hace meses declararon la guerra a la centrales sindicales tradicionales, acusándolas de aliarse con el Gobierno en contra de los intereses de los autónomos y los pequeños comerciantes. De hecho, desde la formación se comenta que el sindicato nace con el claro objetivo de “romper el plácido escenario que desde hace décadas disfrutan UGT y CCOO, que aglutinan todo el poder”. Las mismas fuentes indican que el sindicato de Vox se llamará Solidaridad, un nombre con el que se pretende homenajear a la histórica central obrera de Polonia de los 80 que impulsó a Lech Walesa, el prestigioso político que se enfrentó al comunismo que encarnaba la URSS entonces y al que se considera clave en el final de Telón de Acero. “Se trata de un sindicato que aúna las raíces cristianas y las obreras”, indican desde Vox, donde se trabaja a marchas forzadas para tenerlo todo listo de cara a septiembre.