Redactora de elEconomista

El tono dovish por parte de la Reserva Federal estadounidense parece estar cada vez más cerca y el ánimo de las bolsas así lo refleja. El dato de IPC de noviembre en Estados Unidos del 7,1% (tres décimas por debajo del esperado) da continuidad a los buenos presagios que se desataban tras la publicación del mismo dato en octubre, que bajaba por primera vez en seis meses del 8% al otro lado del Atlántico, al ubicarse en el 7,7%.

El día de exdividendo -fecha en la que las acciones ya no tienen derecho al cobro del dividendo anunciado anteriormente- deja la cotización de Telefónica a solo un 1,3% de los mínimos anuales. La compañía cerraba la jornada del martes como la más bajista del Ibex 35, con una caída del 4,9%, ya que era ayer cuando se fijaba la fecha de corte del pago al accionista de 0,15 euros, que rentan un 4,2%, y repartirá el próximo 15 de diciembre.

El impulso que experimentan los títulos de Solaria Energía en diciembre no es suficiente para convencer a los expertos. Así puede verse en las últimas valoraciones que recibe la compañía, que no son tan optimistas como su evolución en el parqué en las últimas jornadas, ya que se encuentra entre las firmas del Ibex que más suben del mes, con un 1,02%, y cerraba la sesión del lunes como el valor del selectivo más alcista, con un 2,8%.

En pocas ocasiones ha resultado tan atractivo comprar bolsa europea frente a la americana, o así puede leerse si tenemos en cuenta la ratio PER (veces que el beneficio se recoge en el precio de la acción). Actualmente, el Stoxx 600 ofrece el mayor descuento frente al S&P 500 desde que hay registros. La referencia del Viejo Continente brinda un multiplicador más que el doble de barato con respecto a la media histórica con Wall Street. En números, el europeo se compra, a precios actuales, a 12,3 veces, según datos de Bloomberg; es decir, más barato que la media histórica. El S&P 500 eleva este multiplicador hasta las 18,5 veces (por el contrario, una cifra superior a la de su propia reversión a la media). Esto dejaría una brecha, a favor del PER europeo, de hasta seis puntos, es decir; un 114% más barato que la diferencia de la media histórica entre ambos índices, que es de 2,8 veces.

Los datos que aguardan a la referencia nacional para el año que viene no son halagüeños si comparamos el beneficio neto que se espera para este ejercicio -a tan solo tres semanas de finalizarse- con el pronosticado para 2023. Los 55.157 millones que se vaticinan para 2022 se reducirán a 47.491 millones el año que viene, según datos de FactSet. Una caída del 13% que deja al Ibex como el índice continental donde se verá un mayor tijeretazo en las ganancias netas esperadas.

Las vísperas navideñas parecen no sentarle demasiado bien al sector bancario europeo, que es el segundo segmento más bajista de diciembre, con una caída del 1,5%. Lo mismo ocurre con la banca española, que tras liderar las subidas anuales, empieza la primera semana del mes con CaixaBank, Bankinter y Banco Sabadell como tres de los valores más bajistas del Ibex 35.

El tono menos hawkish de la Reserva Federal estadounidense (Fed) no ha calado en las bolsas a ambos lados del Atlántico tanto como lo hizo con el dato de inflación americana del mes de octubre. Al menos, no de la misma manera. Tras una semana marcada por la volatilidad en los índices europeos, con sesiones de los dos colores, y tras haber estado en el terreno negativo durante parte de la jornada del viernes, el EuroStoxx 50 logró cerrar la semana con un tibio avance del 0,4%. Por lo tanto, la racha semanal alcista más larga del año sigue sin romperse para la referencia europea, que ya acumula nueve semanas en positivo.

A menos de un mes de dar por concluido un año que se recordará por una inflación histórica, el sector de los viajes logra desplegar sus alas tras dos ejercicios saturados de dificultades y se postula como una de las mejores opciones de inversión para analistas y gestores. Así se refleja en la última renovación de la cartera de Eco10 –el índice de ideas de calidad que elabora elEconomista.es con la colaboración de 54 firmas y calculado por Stoxx–, con muchos de los expertos apostando por buscar refugio en algunas de las compañías de este segmento para los meses venideros.

El mejor comportamiento que se anota el sector inmobiliario europeo este mes, con un alza de en torno el 8%, no le libra de ser el más bajista del año. El segmento está sufriendo en primera persona los daños que los datos macro están dejando a su paso desde el primero de enero y ni el verde que protagoniza mucha de las sesiones en bolsa desde que se publicara el dato del inflación de octubre en EEUU le salva de una estrepitosa caída.

Alfred Hitchcock decía que el cine no es un trozo de vida, sino un pedazo de pastel. Y esto, trasladado al terreno bursátil, también puede aplicarse. Existen compañías que, desligándose de las sacudidas que sufre el mercado por la sucesión de problemas macroeconómicos globales, prometen ser el plato más dulce en los meses venideros. Si ver un crecimiento en el beneficio operativo (ebitda) no es tarea fácil para muchas firmas en las condiciones actuales, elevar esta cifra más de un 50% es todo un reto. Y, además, si se añade una variante más, la de la recomendación, la criba es mucho más exquisita.