La creación de una tasa turística en Comunidad Valenciana es un pulso recurrente entre los tres partidos del Gobierno valenciano de izquierdas. La presión de Compromís y Podemos, que lo incluyeron en sus promesas electorales, ha logrado que entre en fase de tramitación, pese a los recelos socialistas del propio presidente Ximo Puig y del secretario de Turismo Francesc Colomer.