La parte positiva que han dejado las caídas que llevan imperando la mayor parte del año en las bolsas es que se han abaratado. Sin embargo, estos descensos no se han traducido en un tijeretazo en la estimación de beneficio de los principales índices, con el aliciente de que se compran a algunos de los precios más baratos de la última década. Desde mediados de julio, en cambio, y aunque la situación sigue siendo compleja, muchas de las bolsas han recuperado parte del terreno perdido, con alzas alrededor del 2,5% en Estados Unidos este mes, ante la expectativa, aún por ver, de que la inflación pueda haber tocado techo.