China suele recordar a los inversores su singularidad. En su mayoría han sido sorpresas positivas. De hecho, China puede representar el futuro de la inversión. Ahora bien, es un futuro sembrado de potenciales baches para los no iniciados como Evergrande vuelve a demostrar. Tanto es así que últimamente los shocks han dejado dolorosamente claro que no es una inversión para un enfoque pasivo de "comprar y olvidar", entre otras cosas porque comprar un índice hace imposible separar lo malo de lo bueno.

Directora de acciones de mercados emergentes de Pictet AM