La Cámara de Representantes y el Senado de Estados Unidos aprobaron a finales de la semana pasada un proyecto de ley que evitará el cierre del gobierno hasta el próximo 18 de febrero. Sin embargo, la agenda económica del presidente, Joe Biden, que incluye un paquete de gasto adicional por valor de 1,85 billones de dólares, se mantiene en un purgatorio legislativo ante las rencillas generadas entre los senadores demócratas. Al mismo tiempo, otros retos inmediatos, como el impacto de la variante ómicron o la necesidad de elevar el techo de la deuda, continuarán retrasando su ambicioso plan de inversión social y medioambiental del mandatario.