Encarna Piñero
La actividad turística en general y la hotelera en el segmento de sol y playa en particular son acusadas a veces de ser poco sostenibles. Bien por ser intensivas en trabajos de baja calificación y alta estacionalidad, por localizarse en países poco desarrollados y beneficiar en cambio a grandes multinacionales de economías avanzadas o por tener asociados grandes consumos energéticos para brindar a sus huéspedes resorts lujosos.