Redactora de mercados, con el foco puesto en las finanzas personales y en los fondos de inversión.

Lento pero con paso firme, así avanza la rentabilidad de los depósitos en España. MyInvestor, el neobanco respaldado por Andbank, El Corte Inglés, AXA y varios family office, ha entrado de lleno a remunerar el pasivo con dos plazos fijos a 6 y 12 meses que ofrecen una rentabilidad del 3%. En este último plazo, a un año, solo dos depósitos ofrecen un interés superior al de MyInvestor entre los contratables directamente en una entidad. Los de BFF Banking Group (la antigua Banca Farmafactoring) y Wizink.

Un fondo de bolsa internacional gestionado de forma activa ofrece este año una rentabilidad media del 3,8%. Sin embargo, algunos de estos vehículos se desmarcan con rendimientos de doble dígito, y muchos de ellos se caracterizan por tener sello español. Entre estos últimos destaca GVC Gaesco Europa, que se coloca ya en la segunda posición de 260 fondos activos de renta variable internacional presentes en la Liga Global de elEconomista.es. Este vehículo obtiene una rentabilidad del 15,39% desde enero, ligeramente superior a la de Santalucía Grandes Comp Zona Euro B, que suma un 15,36% y hasta ahora defendía el primer puesto español entre los fondos activos de bolsa global.

El multimillonario inversor empezó a invertir en este país hace casi tres años, y en su última concentración de feligreses en Omaha ha asegurado que continuará buscando oportunidades en la región. Las reformas impulsadas por el primer ministro japonés han devuelto atractivo a un mercado que está llamado a tener más peso en las carteras de los inversores extranjeros.

El tipo de fondo más demandado este año es de renta fija. Tras la fuerte caída que se produjo en el precio de los bonos y de las acciones el año pasado, los partícipes buscan productos con los que obtener cierta certeza, y eso se ha reflejado en los flujos a fondos. A pesar de que con los bonos también se puede perder, y mucho, como quedó demostrado el ejercicio anterior, más del 80% del dinero nuevo que ha entrado en la industria hasta abril ha ido a parar a fondos de renta fija, hasta el punto de que su patrimonio supera ya los 100.000 millones de euros. Por suerte, el escenario es totalmente distinto al del año pasado, y los grandes fondos de deuda españoles llevan una subida del 1,13% desde enero, según datos de Morningstar, el doble que su categoría.

Los inversores todavía se están lamiendo las heridas causadas por el mercado el año pasado a raíz de la subida de tipos de interés más rápida de las últimas décadas, que derivó en un ajuste sin precedentes en el precio de los bonos y la bolsa. No hubo donde refugiarse. Los perfiles más conservadores, por poner un ejemplo, que por definición no están dispuestos a asumir riesgo, se enfrentaron a su peor año desde la quiebra de Lehman Brothers, con pérdidas medias del 8,75%, que es lo que retrocedieron los fondos mixtos de este tipo según datos de Morningstar. Con este recuerdo aún presente, y con un entorno todavía incierto, el tipo de producto más demandado este año es conservador, y las gestoras han puesto sus fábricas a trabajar en esta dirección.

Mientras la gran banca se resiste a remunerar los depósitos, las entidades de menor tamaño continúan con su ofensiva. Cada semana alguna mejora su oferta. Las últimas en mover ficha, elevando sus rentabilidades, han sido EBN Banco, y Banco Finantia. Además, Wizink ha estrenado dos, a tres y doce meses. Este último se ha convertido en el más rentable del mercado en el plazo de un año, al ofrecer una rentabilidad del 3,3%.

La gestión pasiva avanza con paso firme en Europa. En el primer trimestre del año, marcado por el regreso de la volatilidad ante la crisis de la banca regional en Estados Unidos y la continuidad en las subidas de los tipos de interés de los bancos centrales, los inversores europeos han preferido exponerse al mercado a través de ETF y fondos índice, más baratos, en lugar de hacerlo mediante los fondos activos.

La gestión del riesgo va intrínseca en el ADN de Carlos Val-Carreres. Nada más licenciarse estudió un máster de gestión de riesgos en Reino Unido y empezó su carrera como gestor de fondos long-short en Ibercaja, aunque su etapa más conocida en sus 20 años de trayectoria es la que desarrolló en Lierde, la sicav de la familia Alierta. Tras su fugaz paso por Singular Bank se puso al frente de Myinvestor Value, un fondo de método, como él define, que ha conseguido ser el segundo más rentable de su categoría Morningstar, la de compañías europeas de pequeña capitalización, con una volatilidad inferior a la de los índices. "El secreto está", dice, "en en cómo hacemos las cosas".

El sector del lujo ha sido uno de los grandes beneficiados de la reapertura de la economía china. Con la incorporación del consumidor asiático al mercado del ocio y los productos no esenciales, los colosos del sector aventajan en el parqué a cualquier índice de referencia. El selectivo Stoxx Luxury 10 con las diez compañías de referencia del grupo -las grandes compañías del ramo están en el Viejo Contiente- sube en el año un 30% frente al 12% que avanza el Stoxx 600 con las principales capitalizadas del continente.

El primer trimestre del año ha ido rodado para la mayoría de activos, con ganancias en casi todos. Solo hubo algunas excepciones, como el dólar o el petróleo. Ni la crisis de confianza en la banca, originada por la quiebra del banco SVB y el posterior rescate de Credit Suisse por UBS, ni la firmeza de los bancos centrales en su lucha contra la inflación han descarrilado al mercado. Todos los perfiles de inversor, desde el más conservador hasta el más arriesgado, ganan dinero este año, o deberían, a tenor del comportamiento de cada activo hasta ahora y sus expectativas de rentabilidad. Buena parte de lo previsto para todo el año se ha conseguido ya.