A pesar de la incertidumbre económica que presidió el 2022, la Generalitat logró materializar inversiones por valor de 619,3 millones de euros en Cataluña, el dato más alto de la serie histórica. A través de su agencia Acció, el ejecutivo atrajo a 94 proyectos de multinacionales, la mayor parte de otros países de Europa. Logró movilizar el mayor volumen de dinero de la serie histórica, aunque es apenas el 1,2% superior a la cifra de 2021.

La transformación de Holaluz hacia una empresa enfocada a la energía solar llega de la mano de una intensiva política de contratación. La cotizada catalana en el BME Growth ha necesitado formar su propia estructura con tal de instalar y vender las placas que comercializa, un servicio que no puede realizar a través de terceros y la ha llevado a triplicar su número de personal a lo largo de 2022. La firma pasó de 250 trabajadores a 752 en un año, y para este 2023 espera, como mínimo, duplicar la cifra.

El salón Integrated Systems Europe (ISE) batió este 2023 una edición de récord y alcanzó los 58.107 asistentes en el recinto de Gran Vía de la Fira de Barcelona. En total, visitantes de 155 países diferentes visitaron las instalaciones del evento barcelonés. Hasta ahora, la cita más multitudinaria había sido la última celebrada en Ámsterdam, con más de 52.100 asistentes, mientras que la edición de 2022 en Barcelona congregó a casi 43.700 participantes.

A pesar de marcar líneas rojas durante medio año, los Rubiralta dan un giro en su negociación con los fondos por el futuro de Celsa. La familia propietaria de la siderúrgica ha aceptado por primera vez dar entrada a los acreedores en el capital de la firma, siempre y cuando se queden por debajo del 50%. Las conversaciones se retoman ahora mientras la resolución del plan de reestructuración se acerca.

Aunque haya terminado por ser de manera inesperada, el empresario Enrique Bañuelos dejará de ser accionista de QEV Technologies, la firma escogida –junto a Btech- para quedarse con la antigua fábrica de Nissan en la Zona Franca de Barcelona. El valenciano poseía su participación a través de la sueca Inzile, que quebró en otoño, que perderá definitivamente en las próximas semanas, cuando Garrigues adjudique el 12%. La firma trata así de desvanecer la sombra del polémico dirigente.

El grupo papelero portugués Navigator cierra la adquisición de las divisiones de gran consumo de la catalana Gomà-Camps. A cambio de 85 millones de euros, la firma especializada en papel tisú con sede en Tarragona ha aceptado deshacerse de la filial española y francesa dedicada a esta línea de negocio.

El plan de reestructuración de Ezentis avanza de la mano de José Elías, su accionista de referencia, y la tecnológica Insyte. Ambos tienen un acuerdo con la banca ?que debe todavía pasar por junta- para salvar la tecnológica a cambio de escindirla en dos y sacar el negocio de instalaciones de bolsa. Por el momento, este martes han anunciado una inyección de 16 millones de euros a la espera de firmar el rescate definitivo, algo que debería producirse este mismo febrero.

El resultado de la demanda colectiva de hasta 54.000 donantes estadounidenses contra Grifols se juega estas semanas en la Corte Suprema de Illinois. Tras obtener el visto bueno judicial para emprender su camino en los tribunales, los promotores de la denuncia contra la empresa española por vulnerar su privacidad en los centros de recolección han decidido congelar el procedimiento a la espera de dos resoluciones que permitan, a ambas partes, tener claro el alcance de la sanción a la que se enfrentaría la compañía.

La Generalitat de Catalunya ya tiene quién le sirva la energía para todo 2023. La administración catalana agrupa buena parte de sus contratos a través de dos macrolicitaciones con tal de obtener mejores condiciones para los diferentes organismos que engloba. El pasado diciembre cerró las adjudicaciones por un valor conjunto que supera los 540 millones de euros entre electricidad y gas y que coparon Acciona y Naturgy.

El efecto dominó ya ha llegado a España. Si hace meses fueron las grandes tecnológicas estadounidenses las que emprendieron una política de despidos masivos, estas decisiones llegan ahora al ecosistema nacional. La pasada semana fue Wallbox y este lunes ha sido Glovo la que ha anunciado un recorte de 250 trabajadores, el 6,5% de su plantilla, la mayoría en la sede central en Barcelona.