Wall Street encara el final de la semana con optimismo y logra subidas cercanas al 2%. Los temores a una recesión y unos resultados empresariales mixtos en los últimos días no han impedido que el S&P 500 haya batido los 3.027 puntos durante la sesión, que es su máximo histórico, tras repuntar un 0,40% este viernes, aunque ha acabado en el nivel de los 3.022,34 puntos. Por su parte, el Dow Jones sube un 0,57%, hasta situarse en las 26.958,06 unidades, y el Nasdaq 100 rebota un 0,78%, hasta los 8.029,22 puntos.
El S&P 500 ha enviado una señal de fortaleza al tocar de forma intradía sus máximos históricos a un cierre de sesión, los 3.027 puntos. Pero el hecho de que haya terminado la semana por encima de los 3.020 puntos ya es algo positivo, ya que "se podría empezar a descartar una nueva pata bajista en Wall Street", explica Joan Cabrero, director de Estrategia de Ecotrader.
"Wall Street bate resistencias de corto plazo al fin y se dirige a presionar las resistencias críticas", prosigue el analista, en referencia a los 3.060 puntos. Por el momento, al índice estadounidense le separa un 1,2% de este nivel, o menos de treinta puntos.
De batirse dichas resistencias, el selectivo podrían entrar en "un escenario de subida libre absoluta", es decir, "la situación técnica más alcista que existe".
En el conjunto de la semana, el Dow Jones avanza un 0,75%, el S&P 500 sube un 1,25% y el Nasdaq 100 roza el 2%.
"Si bien es de esperar que la política monetaria en su conjunto siga favoreciendo la economía, no solo en la zona euro, sino también en Estados Unidos y Japón (los bancos centrales internacionales han recortado sus tipos de interés básicos más de 40 veces desde principios de año), unas semanas cargadas de acontecimientos podrían ser tanto un caramelo como una mala pasada", sostiene Ann-Katrin Petersen, VP, Global Economics & Strategy, de Allianz Global Investors.
"La regla es que cuanto menores sean los riesgos bajistas (inducidos por la política), mayor debería ser el apetito de riesgo en los mercados en las semanas próximas. Y cuanto mayores sean esos riesgos, más enérgicos deberían ser los llamamientos a favor de la política fiscal", concluye la experta, quien recalca que en China ya se han previsto nuevos estímulos.
El petróleo sube más de un 4% en la semana, la mejor del último mes
Los futuros del petróleo Brent rozan los 62 dólares por barril hacia el cierre de la sesión en Wall Street, aunque se quedan algo por debajo. No obstante, sí tocaron los 62,1 dólares a lo largo de la jornada, algo que no se veía desde el pasado 30 de septiembre. El crudo de referencia en Europa rebota en torno a un 4,3% con respecto a la semana pasada y eleva sus ganancias anuales por encima del 15%.
En la misma línea se han comportado los futuros del West Texas. Repuntan un 0,7% este viernes, hasta alcanzar la zona de los 56,6 dólares por barril, y avanzan un 5,3% en los últimos siete días, en la que también ha sido su mejor semana desde el 20 de septiembre. En lo que va de ejercicio, el crudo estadounidense acumula una rentabilidad cercana al 25%.
Mientras la OPEP decide si extiende más allá de marzo los recortes de la producción de petróleo, hoy se ha conocido que la producción de Kazajistán está batiendo nuevos récords diarios tras el final de los trabajos de mantenimiento en los tres mayores yacimientos del país. "La producción de la nación centroasiática parece que estará por encima de la cuota [establecida en el acuerdo] OPEP+", informan desde Bloomberg, en lo que es una señal de que no todos los países estarían cumpliendo con el acuerdo que pretende acabar con el excedente de oferta.
El oro repunta un 1% durante la semana
El metal recupera la cota de los 1.503 dólares por onza al avanzar en torno a un 1% con respecto al viernes pasado y parece que busca acercarse de nuevo a los máximos anuales que registró en los 1.554 dólares. En 2019, el refugio gana alrededor de un 17,5%.
Por su parte, las divisas, como el euro, retroceden un 0,8% en la última semana y caen a la zona de cambio de 1,108 dólares, lo que supone una depreciación del 3,4% frente al billete estadounidense, o lo que es lo mismo: el dólar se aprecia un 3,5% sobre el euro.
En cuanto a la libra esterlina, desciende ligeramente en la semana al nivel de 1,158 euros, aunque todavía conserva una rentabilidad del 4% sobre el euro. Su máximo anual frente a la moneda común se sitúa en los 1,177 euros.
Más resultados
Por ahora, ambos índices se mueven bajo esos niveles destacados. Y lo hacen al ritmo de los resultados trimestrales que las grandes compañías de Estados Unidos van publicando.
Así, Intel se dispara más de un 6% y lidera las ganancias en el Dow Jones. Ayer batió las expectativas de los analistas con sus cuentas trimestrales.
3M y Caterpillar le siguen de cerca, con alzas superiores al 2%. Visa asciende cerca de un 1% tras aumentar un 17,2% las ganancias en su año fiscal. Verizon, en cambio, registra subidas leves tras anunciar un beneficio de 5.337 millones de dólares en el tercer trimestre.
Coca-Cola, Boeing y P&G se sitúan en la parte baja de la tabla. La aeronáutica se ve perjudicada por el informe de las autoridades de Indonesia que asegura que los fallos de diseño de su avión 737 MAX 8 fueron determinantes en el accidente que provocó la muerte de 159 personas a finales de 2018.
Amazon es otro de los valores destacados del día. El gigante del comercio electrónico pierde cerca de un 4% en el parqué tras haber reducido un 26% su beneficio entre julio y septiembre. Ayer anunció también una alianza con Apple para llevar el servicio de streaming Apple TV+ a los Fire TV.
A la espera de la reunión de la Fed del miércoles
La Reserva Federal reunirá el próximo miércoles al Comité Federal de Mercados Abiertos para bordar la política monetaria y dejar como están o meter la tijera a los tipos de interés.
"La Fed parece que deja abierta la puerta para un recorte de tipos en octubre", explica Yves Bonzon, CIO de Julius Baer. "Según los futuros de los fondos de la Reserva Federal, los inversores han valorado en gran medida otra disminución para la próxima reunión el 30 de octubre. Unas perspectivas que fueron impulsadas aún más por el vicepresidente de la Fed, Richard Clarida, que dijo que la Reserva Federal evaluaría las perspectivas económicas, así como los riesgos y actuaría de manera apropiada para sostener el crecimiento", sostiene el directivo.
La guerra comercial entre Estados Unidos y China sigue sin resolverse y la siguiente cita que se espera con interés es la reunión entre Trump y Xi en Chile, a mediados de noviembre. Una tensión comercial que empieza a notarse en los resultados empresariales.
"Es mucho más probable que, dada la resiliencia subyacente del consumo y los estímulos que estamos obteniendo de los bancos centrales, cualquier debilidad sea más del tipo que vimos en 2015-2016 que algo más profundo y más prolongado", explicaba la gestora de activos Maya Bhandari en una entrevista reciente con elEconomista. "Pero si las guerras comerciales continúan y no hay ninguna resolución, sí podría ver cómo la caída en el crecimiento podría ser más profunda", advertía la analista.
