El mundo del deporte ha sufrido, al igual que muchos otros sectores, el impacto de la pandemia de coronavirus. Primero fue la suspensión de competiciones como las ligas nacionales, la Champions League, la Eurocopa o los Juegos Olímpicos. A ellas les ha seguido, a consecuencia del parón productivo y de publicidad, la gran bajada en los ingresos que les ha llevado a solicitar ERTEs. Coronavirus, última hora, en directo.
En España, donde el Gobierno ha decretado la agilización de estos expedientes de regulación de empleo en paralelo a la imposición del estado de alarma, todos los deportes se han visto afectados. El Barcelona fue el primer gran equipo de fútbol en anunciar un ERTE y sus jugadores de fútbol (el primero ha sido su capitán, Leo Messi) han confirmado la cantidad exacta de la reducción de su sueldo, un 70%, para evitar que los trabajadores de secciones como venta de merchandising, administración...puedan cobrar todo su salario. El resto de sus secciones deportivas también se ven afectadas por este expediente de regulación de empleo.
A los culés les siguieron sus vecinos 'pericos', el Espanyol. El equipo blanquiazul aplicó una reducción de jornada del 70%, aunque finalmente llegó a un acuerdo con la primera plantilla para dejar la bajada de salario entre un 4% (si se reanuda la competición) y un 19% (de producirse un paro total). El Atlético de Madrid sí que se sumó a un ERTE como tal y anunció que su dirección, su primer equipo masculino y femenino y el Atlético B se bajarían un 70% el sueldo para complementar el salario del resto de trabajadores de la entidad mientras dure el estado de alarma.
A estos tres equipos les siguió posteriormente el Alavés (junto al Baskonia de baloncesto) y después el Sevilla, el último en anunciar un expediente de regulación de empleo tras llegar a un acuerdo con su primera plantilla (sin cifras oficiales). Esto deja ya una cifra de cinco ERTEs en Primera, un 25% del total de equipos, a los que se suma parcialmente el Granada y el Valencia, al estilo Espanyol. El cuadro nazarí ha llegado a un acuerdo con sus jugadores, cuerpo técnico y directivos para reducir un 1% el sueldo en caso de volver la competición y un 13% las primas por salvación (si el fútbol ni vuelve la reducción sería del 19%), pero ha presentado también un expediente para el resto de empleados a los que garantiza el 100% del cobro del salario. Algo que no determina el conjunto ché que solo detalla un acuerdo con sus jugadores y una indeterminada partida económica para garantizar la mayoría del cobro a su personal no deportivo.
El Real Madrid y otros once clubes evitan el ERTE pero sus jugadores se bajan el sueldo
Por otra parte, tanto Betis como Valladolid, Osasuna, Celta, Real Sociedad, Athletic Club, Levante, Villarreal, Mallorca, Leganés y Eibar no han anunciado un expediente, pero sí que sus jugadores, técnicos y el personal directivo se han reducido el salario (en diferentes porcentajes) para mantener el sueldo del resto de empleados en caso de suspensión total de la competición. Una medida similar a la aplicada por el Real Madrid, que tras una reunión con los capitanes ha decidido bajar los sueldos de jugadores de fútbol y baloncesto y de directivos un 10%, en caso de volver a rodar el balón, y un 20% en el peor de los escenarios. Por lo tanto, es ya el Getafe el único que resiste a esta crisis sanitaria, económica y deportiva.
En Segunda División, fue Las Palmas el primero en acogerse a esta medida, sin comunicar la reducción pero con el fin de "garantizar el 100% a sus empleados". Tras el cuadro canario, Real Zaragoza, Ponferradina, Racing de Santander, Tenerife, Lugo, Albacete, Elche y Rayo Vallecano han sido los siguientes en unirse con políticas similares y a la espera de más clubes de la categoría.
El femenino y el fútbol sala terminan sus temporadas con situaciones difíciles de manejar a nivel económico
El fútbol femenino también ha sido afectado por los ERTE. Las filiales de Barcelona, Espanyol, Atlético de Madrid, Sevilla y Rayo Vallecano, junto a Sporting de Huelva, Granadilla Egastesa y Logroño, dejan en al menos ocho (de un total de 16) el número de clubes de la Liga Iberdrola que han tenido que recurrir a un expediente de regulación de empleo. El resto, aunque pertenecen a entidades con secciones masculinas que han realizado algún tipo de reducción salarial, éstas no han afectado a sus salarios.
Queda así el único club que no ha hecho ERTE o no pertenece a un equipo acogido a reducción salarial, el Madrid Club de Fútbol Femenino. Este conjunto ha sido más radical y directamente adoptó la "suspensión temporal de contratos de trabajo" por causa de efecto mayor.
Decretado el fin de su temporada, con el Barcelona como campeón, algo similar ha ocurrido en el fútbol sala donde tampoco se disputarán más encuentros a la espera de los playoffs por el título. Junto al ERTE aplicado en el Barcelona, Osasuna Magna, Viña Albali Valdepeñas, O Parrulo Ferrol, Ribera Navarra y Rubén Burela fueron los primeros clubes que tuvieron que recortar ante el incierto escenario que planteó la ausencia de partidos por el coronavirus.
Los ERTEs han hecho mella en LEB Oro y Asobal
En el baloncesto español también ha caído los primeros clubes. Baskonia, Basket Zaragoza, Baxi Manresa, UCAM Murcia, Obradoiro, Fuenlabrada y Estudiantes se han sumado, en ACB, a la sección de la canasta culé y hasta 17 clubes de LEB Oro, de 18, han presentado ERTEs en sus plantillas deportivas y personal administrativo (Almansa, Mallorca Palma, Ourense, Guipuzkoa, Fundación Lucentum, Força Lleida, Breogán, Peñas Huesca, Leyma Coruña, Oviedo, Peixe Galego, Atlético Valladolid, TAU Castelló, Palencia, Melilla, Cáceres y Granada).
Este porcentaje tan alto de la segunda categoría de baloncesto donde solo el Real Canoe resiste, debido a las grandes complejidades que tienen sus clubes, solo es igualado por la élite del balonmano español. En Asobal, son 15 las entidades (de un total de 16) que han presentado el expediente sobre sus plantillas, con Bidasoa Irún como excepción. Tras la sección del Barcelona, Ademar León, Logroño, Puente Genil, Atlético Valladolid, Benidorm, Cantabria Sinfin, Guadalajara, Anaitasuna, Cangas Morrazo, Cuenca, Granollers, Bada Huesca, Nava y Puerto Sagunto completan la damnificada lista que ha acabado empujando a que el balonmano español eche el cierre esta temporada.