carrera de obstáculos
El guión previsto por BBVA hace un año dio un giro radical. El camino de vino y rosas que presagiaba para 2018 y 2019 se ha convertido en una auténtica carrera de obstáculos. Los últimos doce meses han sido los peores de su historia debido, sobre todo, al aluvión de demandas de calado que están recibiendo en los juzgados a las que tiene que hacer frente en los principales países donde opera. Por eso, el futuro más cercano para la entidad se avecina bastante complicado.