Internacional
Vladimir Putin se ha marcado el objetivo de convertir a Rusia en una potencia mundial en producción de leche en mitad del bloqueo económico de la Unión Europea desde la ocupación de Crimea. El país ha conseguido esquivar el embargo de alimentos lácteos con la importación de 45.000 vacas desde los países de la Unión Europea y atrayendo una inversión de 2.800 millones de de euros, incluida la participación de empresas alemanas. El Kremlin se ha marcado un plazo de ocho años para convertir Rusia en autosuficiente para no depender de las importaciones extranjeras.