Hace más de cuatro años, en plena pandemia, Nickel aterrizó en España con una propuesta innovadora frente a la banca tradicional. El neobanco de BNP Paribas brinda una cuenta corriente y una tarjeta asociada sin ninguna condición, a través de una red de establecimientos de estancos y de lotería, entre otros. La entidad, muy sensible a los temas de exclusión financiera, pretende ofrecer a sus clientes un producto muy sencillo, independientemente de sus condiciones financieras, y hacerles la vida más fácil a todos aquellos que se enfrentan a problemas de acceso al efectivo. Desde su lanzamiento en España, su modelo alternativo ha tenido un rápido crecimiento, pero su consejera delegada asegura que todavía hay margen para mucho más, siguiendo la estela de su país natal: Francia.