En lo que va de 2024, el mercado bursátil japonés ha logrado una fuerte rentabilidad, con el Nikkei 225 superando por fin el máximo de la era de la burbuja registrado en diciembre de 1989. La solidez de los fundamentales de las empresas, la mejora de las normas de gobernanza y la creciente demanda de los inversores extranjeros han contribuido a los buenos resultados del mercado bursátil. Una cuestión clave para los inversores debe ser ahora si el mercado puede seguir avanzando.