23/09/2022, 06:00
Fri, 23 Sep 2022 06:00:07 +0200
https://s03.s3c.es/imag/_v0/400x53/3/d/7/logo-ee-anv-home-2.png33043
Un crucero sobre ruedas. Con esta idea nacieron en los años 80 el Transcantábrico, el primero de los trenes de lujo que ahora opera Renfe, el Al-Ándalus, que se unió a la flota con posterioridad, y el Costa Verde Express, el último en entrar a formar parte de este catálogo de vacaciones al más alto nivel en las vías. Pero comer una presa de bellota asada con patatas al ajillo y setas o un atún de almadraba en uno de los vagones que trataban de imitar al icónico Orient Express puede tener los días contados si no hay un aumento del presupuesto. El último intento de Renfe para adjudicar la restauración, la limpieza, los servicios auxiliares y los complementarios a bordo de los trenes turísticos de lujo de la compañía para este 2022 no ha tenido éxito y las empresas han declinado subirse al tren por un contrato cuyo presupuesto de licitación es de 1,99 millones, que se quedó desierto y ha tenido que ser adjudicado por la vía de urgencia a una empresa local asturiana. En cambio, y para evitar que este servicio se vea mermado, Renfe ya está redactando los nuevos pliegos de cara a la temporada de 2023 que lanzará en las próximas semanas.