Tras las perspectivas pesimistas que ensombrecían el devenir económico de la UE, la economía empieza a dar signos de recuperación. El bloque deja atrás la sombra de una recesión y los meses de estancamiento económico de 2023 dan paso a un primer trimestre de 2024 con un ligero repunte. Mientras no llega el impulso económico que se espera para 2025, las diferentes marchas de las principales economías del euro podrían repercutir en las perspectivas de España. Bruselas advierte de que la debilidad del PIB alemán, francés e italiano amenazan la economía española.