Conservar un zumo natural de naranja durante semanas sin que pierda su valor nutricional es posible gracias al procesado por altas presiones (HPP por sus siglas en inglés). Se trata de una tecnología que comenzó a desarrollarse en los años 90 y aplica altos niveles de presión por agua de hasta 6.000 bares durante unos segundos o minutos. ¿El objetivo? Alargar la vida útil de alimentos sin procesar.