Vicepresidente de Gesternova Energía

Hace unos días, mientras revisaba comentarios escritos durante otros mercados bajistas -como los del último trimestre de 2018, el primer semestre de 2020 o incluso el turbulento 2022-, me sorprendió descubrir cuán actuales siguen siendo para abordar las inquietudes de nuestros clientes durante los últimos días. Incluso en mercados alcistas, como el del pasado año, eventos inesperados, como la decisión en Francia de convocar elecciones de manera anticipada, nos recuerdan que la historia de los mercados tiende a repetirse con distintos protagonistas.

Hace unos días tuve el honor de participar en el I Congreso de Descarbonización y Sostenibilidad de la Asociación Nacional de Empresas y Servicios Energéticos y, de entre los valiosísimos aprendizajes que me llevé, la principal lectura que saqué de la cita es que la descarbonización es irreversible. Por ello, comparándola con las conclusiones definitivas de la COP 28, quiero ser optimista respecto al presente y futuro.

Vivimos en un país que vive casi todo con pasión y cuando nos da por algo, somos tan capaces de amarlo con intensidad, como de abandonarlo con absoluta desidia. Pocas veces nos instalamos en el término medio, que, al fin y al cabo, es lo que necesita una actividad como el autoconsumo que ha vivido en el último año y medio largo su momento dorado, pero que parece estar en declive.

Podría empezar esta tribuna diciendo que vivimos tiempos revueltos en el sector eléctrico, pero sería más apropiado decir que el sector eléctrico no conoce remansos y cuando no es por una coyuntura de precios altos del gas de consecuencias globales, un cambio regulatorio nos preocupa y nos genera incertidumbre.

Últimos artículos de Opinión